Biografía de Waris Dirie

La somalí Waris Dirie, quien nació en 1965 en el seno de una familia nómada musulmana, se hizo conocida, a lo largo de su vida, en diferentes ámbitos ya que, además de modelo, es escritora y una gran activista que lucha contra la mutilación genital femenina.

Cuando sólo tenía trece años de edad, esta mujer que, para ese entonces, ya había sufrido la ablación del clítoris, fue entregada, en el marco de un matrimonio arreglado, a un hombre mucho mayor que ella. Para evitar esa situación con la que ella no estaba de acuerdo, Waris decidió escapar. Primero vivió en la casa de su hermana, tiempo después se instaló junto a una tía y, en 1981, viajó a Londres, donde su tío, quien por esa época era embajador de Somalia, la hospedó a cambio de que ella trabajase en la casa como empleada.

Por ese entonces, Dirie no imaginaba que, a los 18 años de vida, mientras realizaba tareas de limpieza en un local de comidas rápidas, sería descubierta por un fotógrafo inglés quien, al retratarla, le permitió obtener algo de fama. Para su sorpresa, su aspecto no sólo no pasó desapercibido, sino que la convirtió en una modelo interesante.

A partir de entonces, Waris Dirie no sólo participó en una gran cantidad de desfiles, sino que también fue la imagen de una gran cantidad de prestigiosas marcas y hasta inspiró la creación de un documental.

Valiéndose de la popularidad alcanzada, en la década del «90 esta bella somalí decidió escribir un libro que le permitiera dar a conocer el drama de la mutilación genital femenina. Esa obra, titulada «Flor del desierto», aparecería en 1998 y le permitiría a su autora recibir numerosos reconocimientos, además de darse a conocer como escritora.

Con los años, Waris sumaría a su producción literaria títulos como «Amanecer en el desierto», «Niñas del desierto» y «Cartas a mi madre».

Comentarios1

  • Elsy Alpire Vaca

    Que buena información, sobre todo tratándose de una mujer que luchó a raiz de una desgracia física con la mutilación íntima que padeció, ojala su historia sea conoc ida por muchas mujeres de aquel país donde no se sabe hasta cuándo seguirán padeciendo lo mismo sin solución, pero esta información es válida para mostrar a las demás mujeres del recuadro dramático aquel, que eiste una espeanza; esperanza que algún día será una linda realidad, tal y como le sucedió a la artista Wais. Gracias Verónica por tu artículo. Sigue adelante.



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