Todo el amor era de mar sereno/
Yo te recordaba
cuando tus dulces labios me besaban/
La acera derrochaba su enero y
el curioso ojo de la parra se embelesaba/
Era de ola impetuosa tu arremetida en deseo,
al dividir la ebria espuma de mis manos en tu cuerpo/
Pechos juntos, pieles de roce/
Hábitos gemelos de incesto/
Fue el tiempo que desterramos al bracero/
Por la blanda carne entrábamos hasta los huesos,
colmadas las almas como un corpuscular jardín
de abiertos claveles mirando al porvenir/
Se anudaban los extremos,
los estómagos aliaban sus puntas/
¡Pero mujer!
El mar apartó su calma,
su continente se hizo lago amotinado/
Hoy solitarias ostras en dos riberas de alambrada,
ya la furia pasionaria enmarcó el recuerdo del alba/
En el amarillo cuadrado maltrecho
habló el opaco ladrillo
con el clamor de la pared malgastada/
El cerrado tálamo congeló las sábanas
y la cama dejó su frío destino de ruleta hastiada/
Hubo solo un adiós de momento
que no equilibró el corazón deshecho/
- Autor: RICARDO ALVAREZ ( Offline)
- Publicado: 7 de septiembre de 2011 a las 00:07
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 166
Comentarios1
Como siempre amigo Ricardo y como dice mi niña Paloma, es grato seguir el vuelo de su pluma y admirar lo que generosamente nos obsequia.
Un abrazo desde mi alma
Bendiciones en abundancia
Lilian
TE AGRADEZCO LIZ. LA PALOMA QUE NOMBRAS ES TU HIJA O TU HERMANA EN OTRA PAGINA ?. ABRAZOS. LIZ.RICARDO
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