Tráeme rosas robadas de algún jardín, cualquiera,
pero que sean robadas.
Me gusta lo furtivo, lo oculto, lo callado.
Dicen que hay en la luna un rostro que no vemos.
Tráeme de allí las rosas,
allí crecen sin miedo.
Es suyo el infinito.
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es un poema bien chevere necesito mas
esta bonito pero corto
quiero + del poema
Muy bonito, corto pero con un contenido especial
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