Sombra que exhala el alcohol de la noche
la carne celebra en los rincones
Mi cuarto es una prisión
La casa de enfrente no existe
el árbol gigante la acuna
Se llena de hojas mi cuerpo
hasta que la luz salpique sobre el alba
Un cuerpo desnudo flota sin destino
su carne, toda dispersión y sueño
Sólo un susurro la noche.
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