El pincel
es la lengua.
Los labios apretados
colocan el pelo de la mujer desnuda.
Quietudes en la piel:
reposo inverosímil.
El temblor pequeño
es el fragmento infinitesimal
del estallido.
Me gustaría saber
quién se ha comido la manzana
(pues creo
que de haber sido yo
me acordaría).
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