El 3 de junio de 2017, las letras mexicanas perdieron a Antonio Sarabia, un creador de poesías, cuentos y novelas que encontró la muerte en Lisboa. A días de su fallecimiento se le rindió en la capital de Portugal un homenaje a cargo de la Casa de América Latina para enaltecer su legado; hoy, desde estas líneas, la idea es recordar quién fue y qué aportes culturales hizo este hombre que nació el 10 de junio de 1944 en la Ciudad de México.
Al repasar su trayectoria se advierte que, tras asistir a la Universidad Iberoamericana para instruirse en Ciencias y Técnicas de la Información, este mexicano que llegó a sobresalir en el ámbito de la narrativa moderna iberoamericana sumó experiencia en los rubros publicitario y radial.
“Tres pies al gato” fue la propuesta que, en 1978, marcó sus primeros pasos como poeta. Temporadas más tarde Antonio, cuyos restos se encuentran en el Cemitério dos Prazeres, emprendió una travesía de varios años que lo llevó a residir en ciudades como Lisboa, Guadalajara y París. Hacia 1988, Sarabia consiguió una fuerte visibilidad como novelista ya que su obra “El alba de la muerte” estuvo entre los relatos finalistas del Premio Internacional Diana-Novedades.
De ahí en adelante, cautivó a críticos y lectores por medio de títulos como “Amarilis”, “Los avatares del piojo”, “Los convidados del volcán”, “El cielo a dentelladas” y “El retorno del paladín”.
Asimismo, se unió a diferentes colegas para desarrollar libros como “Primeras noticias de Noela Duarte” (proyecto que lo unió a José Ovejero y a José Manuel Fajardo) y “Cuentos de mar” (donde aparecen textos suyos y de intelectuales como Rosa Montero y Mempo Giardinelli, entre otros).
“Troya al atardecer”, “Acuérdate de mis ojos” y “No tienes perdón de Dios” son otros materiales que forman parte de su producción. Cabe resaltar que numerosas creaciones de Antonio Sarabia están disponibles en griego, alemán, francés, portugués e italiano.
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