Armando Uribe

Libros como “Transeúnte pálido”, “El engañoso laúd”, “Los obstáculos” y “No hay lugar” surgieron por las habilidades poéticas de Armando Uribe Arce, un chileno enmarcado en la Generación Literaria de 1950 que además de dedicarse a la escritura sumó experiencia como profesor, diplomático y abogado (especializándose en derecho minero).

Este hombre que dejó una gran huella en su país nació el 28 de octubre de 1933 en Santiago, donde fue alumno del Saint George’s College.

En torno a 1950, diversos periódicos le dieron espacio a las primeras composiciones poéticas de quien asistiera a la academia literaria El Joven Laurel y militara en Izquierda Cristiana. Siete temporadas más tarde, Armando celebró su boda con Cecilia Echeverría Eguiguren, mujer junto a la cual se instaló en Roma para ampliar su formación académica. La pareja estuvo unida por más de cuatro décadas, tiempo en el cual tuvo cinco herederos.

Es interesante resaltar que, a lo largo de su trayectoria, Uribe Arce se desempeñó en el Ministerio de Relaciones Exteriores como ministro consejero, estuvo al frente de la delegación de su país en una Asamblea Extraordinaria convocada por la Organización de las Naciones Unidas, trabajó en territorio estadounidense como empleado de la embajada de Chile y llegó a ser embajador en suelo chino.

Sus conocimientos los transmitió al dar clases en instituciones como La Sorbona, la Universidad Estatal de Michigan, la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Universidad de Chile.

Tras haberse exiliado en Francia junto a su familia, el escritor volvió a su patria de modo definitivo en 1990, siendo admitido por la Academia Chilena de la Lengua en 1993 como miembro de número. El Premio Municipal de Literatura de Santiago, el Premio Altazor de Poesía y el Premio Nacional de Literatura son parte de los galardones que recibió por su tarea literaria.

A raíz de una insuficiencia respiratoria, este exponente del mundo de las letras encontró la muerte en la capital de Chile el 22 de enero de 2020.