Hay escritores cuyos datos biográficos son bien conocidos y hasta difundidos por ellos mismos. Pero también hay otros autores que, en cambio, prefieren sembrar el misterio o hasta difundir leyendas en torno a su figura.
La uruguaya Armonía Somers pertenece a este segundo grupo. Las dudas aparecen incluso desde su fecha de nacimiento: la versión más extendida ubica el momento el 7 de octubre de 1914 en la ciudad de Pando. Sin embargo, algunos señalan que nació en 1917 o hasta en 1930.
Se sabe que su nombre real era Armonía Liropeya Etchepare Locino. La elección del pseudónimo puede haber estado vinculada a su intención de enmascarar su autoría de “La mujer desnuda”, una novela erótica que escandalizó a la sociedad de su época.
Hija de María Judith Locino (una mujer muy religiosa) y Pedro Etchepare (un anarquista anticlerical), cursó la educación secundaria en la Escuela Normal de Montevideo y en 1933 empezó a trabajar como maestra.
Su carrera literaria se inició con la mencionada “La mujer desnuda” en 1950 y continuó tres años más tarde con “El derrumbamiento”, un libro de cuentos que le permitió ganar el Premio de Narrativa del Ministerio de Instrucción Pública.
“La calle del viento norte y otros cuentos”, “De miedo en miedo”, “Muerte por alacrán”, “Sólo los elefantes encuentran mandrágora”, “Un retrato para Dickens” y “Viaje al corazón del día” son otras de sus principales obras.
Somers también escribió ensayos sobre problemáticas sociales, como “Educación de la adolescencia” y “La antisocialidad juvenil en el Uruguay”. Comprometida con la pedagogía, asistió a eventos en diversas partes del mundo, recibió becas de la Unesco y dirigió el Centro Nacional de Documentación Educacional de Uruguay. A partir de 1971, optó por dedicarse por completo a la literatura.
Armonía Somers, quien fuera esposa de Rodolfo Henestrosa, falleció el 1 de marzo de 1994 en Montevideo. De manera póstuma apareció su libro “El hacedor de girasoles”.
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