Además de haber brillado como escritor y crítico literario, a lo largo de su vida el brasileño Júlio Afrânio Peixoto supo destacarse como médico, político, profesor e historiador.
Este hombre, hijo de Virgínia de Morales Peixoto y Francisco Afrânio Peixoto, fue criado en la ciudad de Canavieiras, una localidad brasileña que fue testigo de gran parte de su formación autodidacta.
En 1897, quien en mayo de 1910 fuera elegido como integrante de la Academia Brasileña de Letras, se licenció en Medicina. Por ese entonces, Peixoto se encontraba en Salvador de Bahía y había logrado impactar al ámbito científico de su país con una tesis bautizada como «Epilepsia y crimen».
Los años siguientes lo encontraron en Río de Janeiro, ciudad en la cual se desempeñó como inspector de Salud Pública y director del Hospital Nacional de Enajenados, de la especialidad de Medicina Legal de la Facultad de Medicina (donde también fue profesor), de la Escuela Normal de Río y de Instrucción Pública del Distrito Federal.
Tras haber sido elegido en 1924 como diputado federal por Bahía, Peixoto retomó su actividad docente en el Instituto de Educación de Río de Janeiro y aceptó el cargo de rector en la Universidad del Distrito Federal.
Aunque hubo épocas en las cuales este brasileño priorizó su interés por la Medicina, el mundo de las letras lo tuvo como representante desde 1900, año en el cual apareció el drama en cinco actos que se ha dado a conocer bajo el nombre de «Rosa mística». Con el tiempo, su producción literaria también incluiría propuestas como «La esfinge», «María Bonita», «Parábolas», «Las razones del corazón» y «Libro de horas», por citar sólo algunos de los títulos que le permitieron demostrar su talento y obtener reconocimiento a nivel internacional.
Afrânio Peixoto perdió la vida en Río de Janeiro el 12 de enero de 1947.
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