Si uno intenta determinar cuál fue la primera poeta estadounidense en publicar un libro, las averiguaciones no tardarán en dejar al descubierto la figura de Anne Bradstreet, una escritora que, en 1612, nació en la localidad inglesa de Northampton bajo el nombre de Anne Dudley.
Siendo una adolescente de sólo 16 años de vida, esta mujer que estuvo muy bien educada para su tiempo y tuvo contacto desde pequeña con el ámbito cultural se transformó en esposa de Simon Bradstreet, quien llegaría a ser gobernador de la Compañía de la Bahía de Massachusetts. Junto a él, Anne emigró a Estados Unidos en 1630.
Además de demostrar su interés por la literatura a través de una biblioteca personal compuesta por alrededor de 800 libros (muchos de los cuales terminaron destruidos a causa de un incendio que se produjo en su hogar), esta descendiente del matrimonio compuesto por Dorothy Yorke y Thomas Dudley dio muestras de su afición al mundo de las letras mediante la escritura, una actividad que le permitió expresarse y opinar sobre política, medicina, historia y teología bajo la influencia del admirado poeta Guillaume du Bartas.
«Aquí siguen algunos versos sobre el incendio de nuestra casa» y «Contemplaciones» son algunos de los títulos que forman parte de la producción literaria de esta mujer que comenzó a adquirir notoriedad después de que sus primeros trabajos aparecieran publicados en Londres bajo el nombre de «La décima musa nacida tardíamente en América».
Anne Bradstreet, quien a la hora de elaborar sus textos solía inspirarse en cuestiones religiosas, vivencias personales y en todo lo que sucedía a su alrededor, perdió la vida en Massachusetts el 16 de septiembre de 1672. Aunque se desconoce la ubicación precisa de sus restos, se cree que puede estar enterrada en el Old Burying Point de Salem o en el Old Burying Ground on Academy Road de North Andover.
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