La vida de Jean-Claude Izzo, un periodista, militante político y escritor descendiente de una mujer francesa de raíces españolas y un camarero italiano que emigró a Marsella en 1920, comenzó en el sur de Francia el 20 de junio de 1945.
Tras cumplir en 1964 con el servicio militar en la ciudad de Toulon y, más tarde, en Djibouti, el autor regresó a su país y se afilió al Partido Socialista Unificado (PSU). Sin embargo, después de haberse postulado como candidato de las elecciones legislativas de Marsella Izzo decidió alejarse de esa agrupación para ingresar al Partido Comunista Francés (PCF). Por ese entonces, el escritor se convertiría en redactor jefe de la revista de perfil comunista «La Marseillaise» (una de las tantas publicaciones que lo tuvo como colaborador) y, a fines de los setenta, debutaría en el ámbito literario como creador de poemas que se dieron a conocer a través de «Poèmes à haute voix».
Desde ese momento, Jean-Claude jamás dejaría de sumar experiencia en el mundo de las letras, pero el éxito y la popularidad internacional recién le llegarían en 1995, año en el cual apareció «Total Keops», su primera novela. Con ella inició «Série Noire», una trilogía protagonizada por el detective Fabio Montale que se completaría, tiempo después, con «Chourmo» y «Solea».
Aunque ayer, 26 de enero, se cumplieron diez años de su fallecimiento, el espíritu de este talentoso autor francés que brilló como creador de novelas negras y perdió la vida como consecuencia de un cáncer de pulmón, aún se mantiene vivo en cada una de las obras que publicó a lo largo de su trayectoria.
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