Aunque sus mayores hazañas pertenecen al campo de la política, el acercamiento que Milovan Djilas tuvo hacia el mundo de las letras después de haber disfrutado y padecido como consecuencia de sus convicciones, es motivo suficiente para reconocer su faceta de escritor.
Este hombre que nació en Polja (Montenegro) el 4 de junio de 1911 experimentó desde joven un fuerte interés hacia las cuestiones de gobierno. Tan importante se volvió esa temática para él que, ya desde su época de estudiante, experimentó en carne propia las consecuencias del compromiso político.
Por ese entonces, Djilas cursaba la carrera de Derecho en la Universidad de Belgrado, se identificaba con la doctrina marxista y había comenzado a desarrollar actividades contra la monarquía, razón por la cual fue encarcelado durante tres años y recibió múltiples torturas.
Sin embargo, ese castigo no lo desanimó y, ya en libertad, mantuvo su perfil revolucionario. En 1940, este hombre que, alguna vez, supo ser amigo de Josip Broz (más conocido como Mariscal Tito), comenzó a formar parte de la dirigencia del Partido Comunista de Yugoslavia.
Identificado con la ideología de su amigo, Djilas luchó junto a él en la Segunda Guerra Mundial, aceptó numerosos cargos relevantes en el gobierno de posguerra y alentó, en 1948, la ruptura de Tito con el líder José Stalin. Años más tarde, su desempeño sería premiado con el cargo de vicepresidente de Yugoslavia y presidente de la Asamblea Nacional.
Pese a ese presente que parecía augurar un futuro aún mejor, los malos tiempos no tardarían en llegar. El fin de su carrera política surgió a causa de una serie de críticas que Djilas formuló hacia la burocracia comunista. A partir de allí, perdería sus cargos, sería expulsado del partido y hasta sería llevado, una vez más, a la cárcel.
Alejado del mundo de la política pero convencido de querer dar a conocer los conocimientos adquiridos en ese campo, este yugoslavo que falleció el 20 de abril de 1995, comenzó a explotar su faceta literaria. Así surgieron, por ejemplo, «La nueva clase», «Tierra sin justicia», «Conversaciones con Stalin», «La sociedad imperfecta» y «El discípulo y el hereje».
Debes estar registrad@ para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.