El horror del nazismo y del totalitarismo comunista quedó registrado en una gran cantidad de libros. Entre ellos, en una obra célebre escrita por la húngara –nacionalizada francesa– Irène Kovach de Szendrö, conocida en el ámbito literario como Christine Arnothy.
Nacida el 20 de noviembre de 1930 en Budapest, adoptó el francés como lengua materna. Christine tuvo la posibilidad de crecer rodeada de libros que eran propiedad de su padre, un acaudalado profesor de latín. Amante de la literatura, en 1944 escribió su primer cuento.
Con Budapest ocupada por los nazis y asediada por los rusos, su familia se vio forzada a esconderse en un sótano, viviendo una situación similar a la narrada por Ana Frank en su diario. Al igual que esta adolescente, Arnothy también comenzó a escribir sobre sus vivencias. En 1948, cuando la familia decidió marcharse de su país, Christine se llevó sus notas ocultas en un abrigo.
La primera escala del periplo fue Viena (Austria), donde Arnothy se casó para poder acceder al territorio francés. En Francia contrajo nuevamente matrimonio, esta vez con el amor como motor, y tuvo una hija. Luego se reunió con sus padres en Bélgica y finalmente volvió a París.
En 1954, Arnothy tomó las notas que había escrito en el sótano húngaro y creó un texto que envió a un certamen organizado por Le Parisien Libéré: así fue reconocida con el Grand Prix Vérité. En la gala de premiación conoció a Claude Bellanger, director del periódico, quien sería su amante durante una década hasta que se casaron en 1964.
El trabajo premiado fue publicado en 1955 como “J’ai quinze ans et je ne veux pas mourir” (“Tengo quince años y no quiero morir”). Al año siguiente, Arnothy presentó su primera novela, titulada “Dieu est en retard”.
A lo largo de su carrera literaria, Arnothy alternó entre novelas y cuentos. También regresó a sus días como exiliada, publicando una secuela de “Tengo quince años y no quiero morir” que tituló “No es fácil vivir”, centrada en su traslado de Viena a París.
Colaboradora de Elle, Combat y otros medios franceses, Arnothy también publicó novelas policíacas con el pseudónimo de William Dickinson y escribió para la televisión, la radio y el teatro.
El fallecimiento de Christine Arnothy se produjo el 6 de octubre de 2015 en Francia. Tenía 84 años de edad. “La felicidad de un modo u otro”, “El jardín negro”, “Un tipo maravilloso”, “Un paraíso a la medida” y “Carta abierta al hombre de todos los días” son otros de sus libros con traducción al castellano.
Debes estar registrad@ para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.