La mexicana María Concepción Urquiza del Valle, más conocida como Concha Urquiza, nació el 24 de diciembre de 1910 en la ciudad de Morelia. Sin embargo, permaneció poco tiempo en la capital de Michoacán: cuando tenía apenas dos años de edad, sufrió el fallecimiento de su padre, un hecho que llevó a su madre a trasladar a la familia a la Ciudad de México.
A los 12 años, Urquiza comenzó a colaborar con diversas revistas, publicando poemas de su autoría. En su adolescencia entrevistó a autores como Federico Gamboa y Xavier Villaurrutia y en 1928 se instaló en Nueva York (Estados Unidos), donde permaneció cinco años y trabajó para Metro Goldwyn Mayer en el área de Publicidad. A su regreso retomó sus estudios en la Escuela Nacional Preparatoria.
Luego de militar en el Partido Comunista, Urquiza se aferró al catolicismo e incluso ingresó a un convento, aunque después se alejó de la orden y empezó a ejercer la docencia en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP). Es importante mencionar, de todos modos, que la espiritualidad está presente en la poesía de esta escritora que también desarrolló guiones de cine.
Pese a mantener contactos con diversos grupos literarios, Urquiza conservó la independencia en cuanto a su estilo. Se trató de una mujer que permaneció al margen de las tendencias y cuyos datos biográficos, de hecho, son nebulosos en muchos casos.
“Obras. Poemas y prosas” (una recopilación de Gabriel Méndez Plancarte que se publicó en 1946), “Nostalgia de Dios” (antología de Ricardo Garibay editada en 1985), “El corazón preso” (su poesía reunida por José Vicente Anaya en 1990) y “Junio de lluvia vestido” (selección de José Antonio Alvarado en 2006) son algunos de los libros que permiten acceder a la obra de Concha Urquiza, trágicamente fallecida el 20 de junio de 1945 en el mar de Ensenada cuando tenía 34 años de edad.
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