La influencia de los padres a lo hora de elegir una profesión o un oficio es más o menos marcada según la familia. En este caso, resulta evidente que la figura paterna logró contagiar el amor por su trabajo a sus hijos.
Es que, si repasamos la biografía de Stephen King, notaremos la pasión que el autor siempre sintió por la literatura. No sorprende, en definitiva, que dos de sus hijos hayan heredado ese interés por las letras.
Joseph Hillstrom King, nacido el 4 de junio de 1972 en la localidad de Bangor, es el segundo hijo de King. Con la intención de hacer su propio camino, decidió usar el pseudónimo de Joe Hill a la hora de convertirse en escritor. De este modo, cuando tenía 25 años, comenzó a crear sus propios relatos y a firmarlos como Hill.
“20th Century ghosts”, editado en castellano como “Fantasmas”, fue su primer libro publicado, aunque antes otros de sus relatos ya habían aparecido en diversas revistas. Se trata de un libro de cuentos aparecido en 2005 que ganó el Premio Bram Stoker y el British Fantasy Award.
Hill continuó su carrera con una novela: “Heart-shaped box” o, en nuestra lengua, “El traje del muerto”. Presentado en 2007, el libro pronto se convirtió en un best seller en los Estados Unidos.
“Horns” (“Cuernos”) apareció tres años más tarde y supuso su segunda novela. En 2013, Hill volvió a apostar por el género y lanzó “NOS4A2”.
De manera simultánea a la creación de cuentos y novelas, Hill también mostró su creatividad como escritor de cómics. “Lock & Key”, “The Cape” y “Wraith: Welcome to Christmasland” son algunas de sus historietas, en las que trabajó junto a dibujantes como Gabriel Rodríguez, Nat Jones, Zach Howard, C.P. Wilson III y Nelson Daniel.
A medida que su trayectoria incorpora nuevas obras, Joe Hill sigue demostrando que es mucho más que el hijo de un escritor famoso.
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