El 22 de septiembre de 1919 se produjo en suelo madrileño el nacimiento del escritor y periodista José Luis Acquaroni Bonmatí, autor que a muy temprana edad se instaló con su familia en Sanlúcar de Barrameda, donde transcurrió su niñez y parte de su adolescencia. De grande, según se advierte al recopilar datos sobre sus actividades profesionales, estuvo allí como encargado de la Biblioteca y de la Colección Arqueológica.
En 1932, quien fuera marinero voluntario y quedara afuera de la Escuela Naval Militar por razones médicas sufrió la muerte de su padre, un hombre que se desempeñaba en la Armada como médico.
Formado en Filosofía y Letras, aportó textos al periódico de Jerez “Ayer” y dirigió en Cádiz “La Voz del Sur”. Después de casarse en 1955 con Cristina Aguilera, mujer con la cual llegó a tener tres herederos, José Luis se instaló en territorio venezolano y se ganó la vida dando clases en la Escuela de Periodismo dependiente de la Universidad Central.
En 1960, este intelectual que contribuyó al surgimiento del grupo Platero se estableció en la capital de España y se dedicó a redactar artículos para la revista “Selecciones” y otros medios de alcance nacional.
Con los años sumó experiencia como ensayista, demostró su habilidad para la elaboración de cuentos y deleitó a los lectores con un puñado de novelas. A lo largo de su trayectoria lanzó, entre otras opciones de lectura que todavía siguen en circulación, “La corrida de toros”, “Andalucía, más que nacionalidad” y “El cuclillo de la madrugada”.
Gracias a “El turbión” consiguió el Premio Blasco Ibáñez, mientras que “Copa de sombra” le dio la posibilidad de ser recompensado con el Premio José María Pemán y el Premio Nacional de Literatura.
“A la hora del crepúsculo” es otro de los trabajos que componen el legado cultural de este escritor que falleció el 15 de febrero de 1983 en su ciudad natal.
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