El pueblo de Puerto Ruiz, en la provincia de Entre Ríos, vio nacer el 11 de junio de 1896 al escritor argentino Juan Laurentino Ortiz, quien firmaba sus trabajos literarios como Juan L. Ortiz. Creció en la selva de Montiel y, tras estudiar en la ciudad de Gualeguay, se trasladó a Buenos Aires para cursar Filosofía.
En la capital de Argentina conoció a varios referentes literarios y fue parte de la bohemia, aunque en 1915 decidió regresar a Gualeguay, donde permaneció hasta 1942. Luego se radicó definitivamente en Paraná.
Ortiz, casado desde 1924 con Gerarda Irazusta (madre de su hijo Evar), se encargó de la impresión de sus primeros poemarios, que repartió entre sus conocidos. Recién en 1933 consiguió editar su primer libro en Buenos Aires, incrementando su alcance: “El agua y la noche”. En esta obra recogió poemas que había escrito entre 1924 y 1932. Cuatro años después presentó “El alba sube”.
A partir de entonces, todos sus libros alcanzaron buena repercusión, como “La rama hacia el este”, “El aire conmovido”, “La brisa profunda” y “La mano infinita”. Ortiz, famoso por la atención que prestaba a cada detalle de sus ediciones, cosechó numerosos admiradores, entre ellos el escritor Juan José Saer.
En 1957 tuvo la posibilidad de recorrer China y la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (U.R.S.S.) gracias a una invitación de las autoridades del gigante asiático. Cabe destacar que Ortiz tradujo a poetas chinos, así como a Ezra Pound, Paul Éluard y otros literatos.
La Biblioteca Popular Constancio C. Vigil de Rosario reunió en 1971 la poesía completa de Ortiz, incorporando además tres poemarios inéditos. El trabajo se tituló “Bajo el aura del sauce”. Dos años antes el entrerriano había ganado el Gran Premio de Honor de la Fundación Argentina para la Poesía, galardón que compartió con Raúl González Tuñón.
Juan L. Ortiz, apodado Juanele, falleció el 2 de septiembre de 1978 en Paraná. Tenía 82 años de edad.
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