A Julián Herbert la popularidad internacional le llegó gracias a la buena recepción que sus libros han tenido a escala mundial, pero no toda la gente que, alguna vez, leyó un material de su autoría está al tanto de la trayectoria y el pasado de este multifacético mexicano que nació en Acapulco en 1971. Por esa razón, hoy en Poemas del Alma repasaremos la vida y obra de este talentoso autor.
Herbert, quien días atrás fue noticia por recibir el Premio Iberoamericano de Novela Elena Poniatowska en reconocimiento a «Canción de tumba», no tuvo una infancia común: fue criado sólo por su madre y ella no supo (o no pudo) darle la estabilidad que un niño necesita para crecer cómodo y seguro. Por esos años, ambos llevaron una vida nómada y alternaban su residencia entre diversos puntos del territorio mexicano.
Durante su juventud, asistió a la Universidad Autónoma de Coahuila, donde se especializó en Literatura española. Ya en la década del «90, inició su carrera de escritor con un compilado de cuentos bautizado como «Soldados muertos». Poco después probó suerte como poeta y demostró ser también un buen novelista.
«Un mundo infiel», «El nombre de esta casa», «Pastilla camaleón» y «Caníbal. Apuntes sobre poesía mexicana reciente» son otros de los títulos que forman parte de la producción literaria de este escritor que, hasta el momento, acumula galardones como el Premio Nacional de Literatura Gilberto Owen, el Premio Nacional de Cuento Juan José Arreola, el Premio Jaén de Novela Inédita 2011 y el ya mencionado Premio Iberoamericano de Novela Elena Poniatowska, entre otros.
Cabe resaltar que, además de dedicarse a la actividad literaria, Julián Herbert sumó experiencia en el plano docente, desarrolla desde hace tiempo acciones de promoción cultural y hasta se ha permitido demostrar sus dotes musicales en dos agrupaciones de rock.
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