La escritora española María de la O Lejárraga García, a quien también se recuerda con el nombre de María Martínez Sierra, nació el 28 de diciembre de 1874 en el seno de una familia de buena posición económica.
Se instruyó como maestra y dio clases en Madrid pero su verdadera vocación no fue la docencia sino la creación artística. Según se cuenta, ella desarrolló una gran cantidad de obras que fueron firmadas como propias por exponentes masculinos del mundo de la dramaturgia. Incluso, siempre existieron rumores sobre la producción de Gregorio Martínez Sierra, con quien contrajo matrimonio en 1900, porque se creía que María era la única responsable de los textos que se le atribuyeron a su marido. Tras décadas de silencio, María comenzó a luchar para defender sus trabajos y revelar la verdad cuando la hija que su esposo tuvo con una amante empezó a reclamar los derechos de autor.
Más allá de hacer foco en su talento para la escritura, a esta mujer a la cual ya hemos recordado en Poemas del Alma en otra oportunidad se la recuerda por su compromiso social. Esta ferviente feminista que llegó a afiliarse al Partido Socialista resultó elegida en 1933 para representar a Granada como diputada, así como también se desempeñó en la Comisión de Instrucción Pública como vicepresidenta.
El 28 de junio de 1974, María Lejárraga encontró la muerte en territorio argentino, país al que había llegado exiliada en tiempos de Guerra Civil, previo paso por Francia primero y por Estados Unidos después. Desde entonces, libros como “Una mujer por caminos de España”, “Tragedia de la perra vida y otras diversiones”, “Cómo sueñan los hombres a las mujeres” y “Gregorio y yo” permiten mantener presente su figura para que las generaciones más jóvenes de lectores también puedan saber quién fue y qué hizo esta española a la cual se puede conocer con mayor profundidad a partir de publicaciones como “María Lejárraga, una mujer en la sombra” y “María Martínez Sierra: Feminismo y música”.
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