De hacer foco en la denominada Generación del 50 e investigar quiénes están contemplados dentro de ese conjunto, no tardará en surgir el nombre de María Victoria Atencia García, una talentosa poetisa que nació en Málaga el 28 de noviembre de 1931.
Esta mujer que desde corta edad se interesó por el plano artístico y mostró aptitudes para la música, la pintura y el universo poético consiguió ganar popularidad como autora y reconocimiento de sus pares gracias a propuestas como “Arte y parte”, “Cañada de los ingleses”, “El coleccionista”, “Compás binario”, “Paulina o el libro de las aguas”, “De la llama en que arde”, “La intrusa” y “Las contemplaciones”, por citar algunas a modo de referencia.
De su vida personal, se sabe que esta escritora que estudió en instituciones como el Colegio de la Asunción y el Colegio de la Sagrada Familia y ha sido distinguida como Hija Predilecta de Andalucía se casó en su juventud con Rafael León, un hombre que no sólo se transformó en su marido sino también en su compañero de trabajo por ser su asesor y editor. Juntos, además de enriquecer la literatura, tuvieron cuatro descendientes: dos varones (Rafael y Álvaro) y dos mujeres (Victoria y Eugenia).
A fuerza de pasión literaria, compromiso e idoneidad poética, Atencia ha logrado desarrollar una sólida carrera como poetisa, traspasar las fronteras con sus libros, cautivar a lectores de diversas edades y nacionalidades y acumular un gran número de reconocimientos.
Hoy en día, esta española que integra la Real Academia de Bellas Artes de San Telmo como académica numeraria y se desempeña como consejera del Centro Andaluz de las Letras de la Junta de Andalucía atesora galardones como el Premio Andalucía de la Crítica, el Premio Nacional de la Crítica, la Medalla de Oro de la Provincia de Málaga y el VII Premio Federico García Lorca.
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