El ensayo, la poesía y la novela fueron los géneros que cultivó Martín García Mérou, un escritor argentino que, en su corta vida, también sumó experiencia en el plano de la política.
Este autor llegó al mundo el 14 de octubre de 1862 en Buenos Aires, fruto del amor entre una francesa llamada Olimpia Mérou y un español bautizado como Antonio García.
Tras pasar su infancia en la provincia argentina de Entre Ríos, el responsable de “Nuevas poesías (1880-1881)”, “Recuerdos literarios” y “Perfiles y miniaturas” fue alumno del Colegio Nacional de Buenos Aires. Por ese entonces, ganó un certamen cultural y comenzó a aportar folletines al periódico “La Nación”.
Si bien empezó a formarse en Derecho estudiando en la Universidad de Buenos Aires, optó por concentrar su energía en la escritura, actividad que con el tiempo combinó con sus compromisos y cargos diplomáticos.
Haber sido colaborador del “Álbum El Hogar” e integrante del Círculo Científico y Literario nutrió un currículum donde figuran asimismo sus vivencias en la embajada argentina situada en Colombia acompañando a Miguel Cané como oficial de legación. Venezuela, Brasil, España, Perú y Estados Unidos fueron otras de las naciones en las cuales trabajó.
Al repasar su trayectoria tampoco se puede pasar por alto que se desempeñó como ministro de Agricultura durante la presidencia de Julio Argentino Roca.
“Ensayo sobre Echeverría”, “Historia de la diplomacia americana. Política Internacional de los Estados Unidos”, “Cuadros épicos” y “El Brasil intelectual” son otros materiales que componen el legado de este argentino que, en 1905, aceptó trabajar en el Imperio Alemán como embajador.
García Mérou, de acuerdo a lo acordado por las autoridades, iba a ser ministro plenipotenciario frente al Imperio Austrohúngaro y Rusia, pero el destino le jugó una mala pasada, ya que Martín encontró la muerte el 30 de mayo de 1905 a poco de haber arribado a Berlín.
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