La vocación literaria suele ser muy fuerte. Algunos autores sienten el llamado de las letras desde temprana edad y se vuelcan a la escritura, mientras que otros recorren diferentes caminos antes de meterse de lleno a trabajar con la pluma.
El francés Paul Bourget, nacido el 2 de septiembre de 1852 en Amiens, está entre los escritores que intentaron consolidarse primero en ámbitos diferentes al literario. Bourget decidió cursar la carrera de medicina hasta que su verdadera vocación se impuso y abandonó la universidad para entregarse a la literatura.
Desde que publicó su primer poema en 1875, cuando tenía 23 años, este autor demostró su talento en diversos géneros y estilos, ya que escribió poesías, cuentos, ensayos, obras de teatro y novelas.
Su carrera atravesó diferentes etapas. En sus inicios, Bourget solía enfrentarse a los escritores naturalistas. A partir de 1901, cuando se convirtió al catolicismo, sus obras comenzaron a tener un importante componente moral y pasaron a enmarcarse dentro del tradicionalismo.
“Cruel enigma”, “El discípulo”, “La etapa”, “Un crimen pasional”, “Cosmópolis”, “Un corazón de mujer”, “Mentiras”, “Dramas de familia”, “Teoría de la decadencia”, “Un divorcio”, “Ensayos de psicología contemporánea”, “Andrés Cornelis” y “El demonio del mediodía” son algunos de sus libros más destacados.
En sus ensayos, Bourget se ocupó de figuras como Honoré de Balzac, Ernest Renan, Gustave Flaubert y Guy de Maupassant, analizando sus obras y los valores que reflejaban en ellas.
A los 42 años, Bourget se convirtió en integrante de la Academia Francesa. Las últimas décadas de su vida las pasó entre Provenza y París, manteniéndose en contacto con numerosos autores jóvenes que lo buscaban para pedirle consejos.
La muerte lo sorprendió en la Navidad de 1935: aquel 25 de diciembre, Paul Bourget se marchó del mundo terrenal con 83 años de edad y decenas de libros publicados como legado.
Debes estar registrad@ para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.