El español Rafael Santos Torroella, quien además de dedicarse a la creación poética sumó experiencia como dibujante, traductor y crítico de arte, nació el 21 de enero de 1914 en la localidad de Portbou.
Tras asistir a las universidades de Salamanca y Valladolid para formarse en Derecho, el hermano de la artista gráfica y pintora Ángeles Santos Torroella escribió textos que aparecieron en las páginas de la revista “Juliol” hacia 1936, en tiempos de Guerra Civil. Asimismo, fue alumno de la Escuela Superior de Bellas Artes y consiguió licenciarse en Arqueología y Bellas Artes.
En 1938, este hombre que fundó medios como “Cobalto», “Lazarillo” y “El espectador del Arte y la Letra” fue distinguido en Valencia con el Premio de Poesía Combatiente del Este. Con el transcurso de los años, el autor que realizó publicaciones sobre Salvador Dalí, Pablo Picasso y Joan Miró respaldaría su buen desempeño artístico con la Medalla de Oro el Mérito en las Bellas Artes y el Premio Juan Boscán.
Más allá de haber desarrollado una gran cantidad de traducciones (adaptó obras del francés y del inglés, además de haber trasladado al español trabajos de Carles Riba, Joan Brossa y Fernando Pessoa), Rafael enriqueció al mundo de las letras con varios materiales poéticos.
“Ciudad perdida”, “Sombra infiel”, “Nadie, poemas del avión”, “Cerrada noche”, “Sueños” y “Cuaderno-78” son parte de la producción literaria de este autor que formó parte de la Real Academia de Bellas Artes de Sant Jordi.
El 29 de septiembre de 2002, Rafael Santos Torroella encontró la muerte en Barcelona. Su viuda, María Teresa (Maite) Bermejo, falleció en octubre de 2013 y hasta último momento se encargó de cuidar el legado de su esposo: cuando problemas de salud obligaron a hospitalizarla, la mujer negociaba con las autoridades del Ayuntamiento de Girona la venta del archivo personal, la biblioteca y la colección de arte del escritor.
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