Sarah Orne Jewett

El nacimiento de Sarah Orne Jewett, una autora que con su imaginación y habilidad narrativa enriqueció a los géneros del cuento y la novela, se produjo el 3 de septiembre de 1849 en una localidad estadounidense llamada South Berwick.

Esta descendiente de un profesional de la salud al cual de niña solía acompañar en sus rondas médicas fue diagnosticada desde edad temprana con artritis reumatoide. Amaba la naturaleza y encontraba en su pueblo de origen una extraordinaria inspiración literaria que la impulsó a elaborar varios relatos de estilo regionalista.

Quien fuera alumna del centro educativo de Miss Olive Rayne primero y de la Academia Berwick después, completó su formación en 1865. De modo paralelo, amplió sus conocimientos disfrutando volúmenes que nutrían la biblioteca de su familia. En 1871, esta mujer que con frecuencia viajaba a Boston (donde entró en contacto con influyentes personalidades culturales) cultivó su fe uniéndose a la Iglesia Episcopal de Estados Unidos.

Antes de cumplir sus primeras dos décadas de existencia tuvo oportunidad de difundir su primera narración desde las páginas de “The Atlantic Monthly”.

Con los años, su producción fue sumando una gran cantidad de opciones que, con el transcurso de los años, se tradujeron y reeditaron, permitiendo así que cada vez más lectores descubran el legado de Jewett. En español, las alternativas de lectura disponibles son “La extranjera”, “La tierra de los abetos puntiagudos” y “Una garza blanca”, por ejemplo.

Sarah jamás contrajo matrimonio, pero mantuvo un vínculo cercano y duradero con la también autora Annie Fields y su marido, el editor James Thomas Fields. Cuando él falleció, las mujeres decidieron vivir juntas hasta el final de sus días.

A principios de septiembre de 1902, esta novelista se accidentó. Siete temporadas más tarde, su salud se deterioró profundamente. Víctima de un ataque cardíaco, Sarah Orne Jewett murió el 24 de junio de 1909.