William Godwin

Wisbech es la ciudad de origen del escritor y filósofo inglés William Godwin, nacido el 3 de marzo de 1756. John, su padre, era un sacerdote calvinista con quien nunca tuvo una relación cercana. En cambio, su madre Anne fue muy cariñosa con William durante toda su vida.

Godwin estudió en la Academia Hoxton y, como su progenitor, se convirtió en ministro religioso, cumpliendo sus funciones en Beaconsfield, Stowmarket y Ware. En Stowmarket comenzó a acercarse a la filosofía francesa a través de un amigo y en 1782 se instaló en Londres con la intención de dedicarse a la escritura para lograr cambios en la sociedad.

Un año después de llegar a la capital inglesa, publicó “Vida de Lord Chatham”, que fue editada como una obra anónima. Tras este primer trabajo, el siguiente libro de Godwin –ya firmado con su nombre– fue una recopilación de sermones que llevó el título de “Esbozos de Historia”.

La trayectoria literaria de Godwin continuó en 1793 con “Investigación sobre la justicia política y su influencia en la moral y la felicidad”, también conocido como “Disquisición sobre la justicia política y su influencia en la virtud y felicidad de la gente”. Esta obra alcanzó una gran repercusión en su época.

Godwin contrajo matrimonio con Mary Wollstonecraft en 1797. La mujer, una escritora feminista muy reconocida, falleció tras dar a luz a la hija de la pareja: Mary (quien en la adultez se casó con Percy Bysshe Shelley -amigo de su padre- e ingresó en la historia de la literatura universal gracias a su novela “Frankenstein”)

En homenaje a su difunta esposa, Godwin escribió “Memorias de la autora de Vindicación de los derechos de la mujer”. Tras superar el dolor, el escritor se casó nuevamente: la elegida fue Mary Jane Clairmont, con quien tuvo otro hijo (William).

Por diversas dificultades económicas, Godwin se orientó a la literatura infantil con el objetivo de ganar dinero. En 1805, en este marco, también abrió una librería, siendo su director durante casi dos décadas.

En sus últimos años, Godwin se dedicó principalmente a la escritura de novelas, destacándose “Caleb Williams”, “Deloraine” y “Cloudesley”. En 1833, una asignación monetaria gracias a un puesto gubernamental le dio cierto alivio económico. Olvidado por sus pares, William Godwin falleció el 7 de abril de 1836 en Londres.