Cristóbal Ruitiña, respuestas en 280 caracteres

En el día de su cumpleaños, desde Poemas del Alma animamos a hacer foco en la producción literaria del autor y periodista asturiano Cristóbal Ruitiña.

Más allá de haber publicado tiempo atrás detalles del Premio Bellvei Negro de Novela Negra que obtuvo gracias a un trabajo titulado “Rececho”, este portal invita a sus lectores a saber cómo piensa y trabaja el también profesor universitario que se desempeña en el Colegio de Periodistas de Asturias como secretario general.

El cuestionario breve que, muy gentilmente, Ruitiña aceptó responder sin excederse de los 280 caracteres que impone Twitter como límite es una gran fuente de información. De querer acceder a sus obras, es posible tener en cuenta publicaciones como “El Batallón Galicia” y “Os albióis pequenos”, por detallar dos a modo de referencia.

– Siendo periodista y escritor, ¿qué opinas del tratamiento de la información y del abordaje literario vinculado a la pandemia de coronavirus?
– La pandemia está devolviendo centralidad a una profesión que en los últimos tiempos estaba siendo cuestionada por las nuevas formas de elaborar y transmitir información. Aún habrá que esperar para que alguien alcance la profundidad que requiere su abordaje literario.
– ¿Cómo imaginas que sería tu vida sin un libro por disfrutar o escribir?
– Caótica. La lectura y la escritura me proporcionan orden. Sobre todo, la escritura. Y no es solo por las rutinas que imponen, que también. Sino por algo que anida en las propias frases, en el párrafo, en la página, y que yo no sé explicar qué es.
– ¿Cuáles son tus estímulos y propósitos al crear novelas?
– De alguna manera, me mueve el interés por levantar un mundo para, después, o, tal vez, mientras lo construyo, explorar cuestiones que están en este. También me estimula el puro placer de construirlo, de edificar la atmósfera, los personajes, la trama.
– De acuerdo a tu experiencia, ¿es más complejo dedicarse a la literatura o a la actividad periodística? ¿Razones?
– Son lenguajes diferentes y, cada vez, más. El periodismo de antes se parecía más a la novela: construir una historia para tapar un vacío. Ahora, sin embargo, las historias te inundan y toca cribar. Ambas actividades suponen desafíos, si, pero de naturaleza cada vez más dispar.
– Si “Rececho” no fuera producción tuya, ¿qué comentarios le harías llegar a su autor/a después de leer la novela?
– Le diría que nos dé más tiempo con esos personajes. A mi juicio, todo tiene un aire de punta de iceberg que demanda desarrollos posteriores más complejos. Es como si, en realidad, “Rececho” fuese la biblia de una futura serie.