“Temporada de avispas” es el relato que, en 2019, le permitió a Elisa Ferrer (quien en la imagen que ilustra esta nota aparece retratada por Iván Giménez) ser distinguida con el XV Premio Tusquets de Novela. En conversación con Poemas del Alma, tras ser contactada para responder una entrevista breve vía Twitter, esta valenciana indicó que, “sin saberlo”, empezó a gestar esa obra durante su estadía en suelo madrileño. El poco tiempo libre que tenía en esa época lo dedicaba a crear cuentos y, al concluir una historia inspirada en un despido laboral, la voz de la protagonista, Nuria, le “quedó resonando”. Así, entonces, surgieron otras tramas con ella como figura estelar. Ya instalada en Iowa para cursar un máster de Escritura Creativa, Elisa entendió que, en verdad, ansiaba “contar una historia de largo aliento”.
Mientras se prepara para ofrecer un taller enmarcado en las propuestas de la 25º Feria Internacional del Libro de La Paz titulado “Construir personajes de ficción, quererlos como si fueran de verdad” cuyo enlace podrá encontrarse por el Facebook oficial del evento, Ferrer brindó detalles de su modo de desarrollar la creación literaria. Aquellos que deseen disfrutar a distancia esta presentación, tengan en cuenta que se anunció para el próximo 23 de septiembre a las 10 (hora de Bolivia, las cuatro de la tarde en territorio español). En octubre, además, estará al frente de una capacitación de carácter presencial a dictarse en Valencia: “Taller de narrativa (s): Novela y relato”.
Esta escritora que prefiere no definir como “musa” a la “inspiración que viene después de mucho trabajo” porque considera que es un término que a lo largo de la Historia “ha cosificado a la mujer”, acostumbra escribir mucho y avanzar a paso lento, reescribiendo párrafos “de manera obsesiva”. Pese a estar dándole forma a una ficción, Elisa vive ese argumento “como si fuera real” y, de acuerdo a sus palabras, son “esas horas casi mágicas” las que la estimulan a escribir y a disfrutar ese arte.
– ¿Cuál consideras que es, o que debería ser, el rol de la literatura frente a la violencia machista?
– Creo que la literatura debe ponerle un nombre, hacerla visible, denunciarla, servir para que las mujeres que la sufren en silencio comiencen a gritar.
– ¿Cómo fue el proceso creativo de “Temporada de avispas” y qué te dejó, a nivel personal, ese relato?
– He aprendido mucho de este proceso. Nunca me creí capaz de escribir una novela, de crear personajes ficticios y sentirlos como reales. Temporada… me ha dado muchas alegrías, es mi primera novela y creo que nunca olvidaré lo que ha supuesto para mí.
– Al iniciar un texto, ¿qué certezas tienes y de qué modo trabajas para ir avanzado en el contenido?
– Cuando trabajo en un guión cinematográfico siempre sé a donde me dirijo. Cuando escribo literatura avanzo por la historia a ciegas. Al inicio hay una pregunta que trato de responderme, una inquietud, y a partir de ahí nace un personaje que construyo a medida que creo su historia.
– ¿Qué es, para ti, lo más enriquecedor de participar en ferias del libro y eventos similares?
– Aprender de la experiencia de otras escritoras, de otros escritores. Encontrarme con gente que me ha leído, conocer su opinión, saber cuál ha sido su experiencia lectora, a veces muy distinta a la que había imaginado mientras escribía, pero siempre enriquecedora.
– Cuando la inspiración no llega natural y fluidamente, ¿a qué estrategias o recursos apelas para convocar a las musas?
– Pocas veces la inspiración me viene de forma natural y fluida. Al sentarme delante del ordenador comienza la diversión. Tras teclear frases que no me sirven, llega un momento en que eso que escribo empieza a cobrar sentido. Ahí borro lo que no funciona y comienzo a disfrutar.
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