Una noticia sobre sus actividades y logros culturales, sus libros o su presencia en las redes sociales pueden generar en más de una persona interés por la figura del escritor argentino Guillermo Ferreyro, quien recientemente participó en la Feria Internacional del Libro de Praga.
Hoy, sus respuestas en 280 caracteres invitan desde Poemas del Alma a conocer en detalle al hombre que temporadas atrás consiguió quedarse con la categoría de Cuento del Certamen Internacional de Literatura Sor Juana Inés de la Cruz por un material denominado “Pinturitas”.
De querer estar al tanto de las novedades de este autor que gracias a una obra titulada “La Cloaca” ganó el Premio Latinoamericano de Primera Novela Sergio Galindo, una buena opción es visitar con frecuencia el sitio web que lleva su nombre. También se puede entrar en contacto con él vía Twitter y felicitarlo, por ejemplo, por la reciente obtención del III Premio Internacional de Novela Kipus que recibirá formalmente el próximo 23 de mayo en la ciudad boliviana de Cochabamba como reconocimiento a “Mal Trato”.
– A la actividad literaria se llega por múltiples razones: ¿cuáles fueron los motivos que te impulsaron a crear relatos?
– No puedo estar sin escribir e imaginar universos alternativos. Intenté plasmar escenas cotidianas en pintura o cámara, pero la escritura me resultó más eficaz porque propone la intervención del lector para completarse. Los otros transforman tu narración y la vuelven infinita.
– Ser leído y reconocido lejos de tu tierra natal por tu desempeño como escritor, ¿qué te provoca?
– Publicar y tener una circulación del texto es lo que todo escritor espera. No me molesta el lugar donde se produzca ese fenómeno. Lo importante es que suceda.
– ¿Sentís más comodidad al elaborar cuentos o novelas? ¿Por qué?
– En esencia soy novelista. Prefiero irme por las ramas y volver. Mis cuentos suelen ser largos, comparten universo y componen un libro que deliberadamente es un intermedio entre novela y cuento. No confío en los géneros. Creo que hay que escribir y listo. El texto busca su forma.
– Aquellos que todavía no le dieron una oportunidad a “La Cloaca”, ¿qué experiencia se están perdiendo?
– Podrían perderse una lectura vertiginosa, con golpes de ironía, sarcasmo, humor negro y giros abruptos de trama que hacen difícil abandonarla.
– ¿Qué se esconde detrás de cada texto de tu autoría?
– La obsesión por los mínimos actos domésticos que construyen esa normalidad que nos enferma con su violencia contenida.
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