Un blog titulado En clau de negre, las redes sociales, varios libros y diversas notas periodísticas centradas en su actividad literaria dan cuenta de las habilidades que Raquel Gámez Serrano tiene para la escritura.
Esta autora que nació en Barcelona los puede sorprender con “A la seva pell” y cautivar con “No digas nada”, por ejemplo. Precisamente con la última propuesta mencionada logró ganar el Premio Valencia Negra en la modalidad Millor novel•la.
Siempre resulta atractiva la idea de saber cómo piensa y trabaja quien está detrás de relatos capaces de seducir a una gran cantidad de personas, por eso los invito a descubrir qué respondió Gámez Serrano en menos de 280 caracteres. Si les agradan sus novelas, desean mantenerse al tanto de sus novedades profesionales o quieren hacerle llegar algún comentario, no duden en seguirla por Twitter.
– En el ámbito literario, ¿encuentras obstáculos o sientes presiones en tu carrera simplemente por ser mujer? ¿Cómo te desenvuelves para que las actitudes o acciones machistas no te limiten?
– Sí. Cuando las detecto, las denuncio. Yo escribo novelas negras y me cansa que me pregunten: ¿cuál crees que es la aportación de la mujer en el género negro? Sería inimaginable una pregunta así a un hombre. ¿O acaso este género es exclusivo “de” y “para” ellos?
– ¿Cuál es tu mayor anhelo como autora?
– La mayoría de los autores llevamos una doble vida laboral para poder subsistir. Anhelo una sociedad en la cual el arte no sea considerado una afición y decir que escribes, o tocas el bajo, no suscite un mohín burlón. El artista no come del trillado «por amor al arte».
– ¿Qué enseñanzas y vivencias te dejó la escritura de “No digas nada”?
– “No digas nada” me ha reescrito a mí. Tuve la idea de escribir sobre el SAF, un tema poco abordado por los medios de comunicación. Sus personajes me han enseñado lo que el ser humano está dispuesto a hacer para esconder sus propias miserias y fingir lo que se espera de ellos.
– ¿Dónde y cómo, bajo qué condiciones, te inspiras para crear ficción?
– En cualquier lugar y continuamente. Cuando estoy involucrada en un nuevo texto, ya sea novela o relato, prevalece sobre todo. Desde que me levanto hasta que me acuesto. Siempre llevo conmigo una libreta para que no se me escape ninguna idea por pequeña que sea.
– Si pudieras modificar el final de una novela de otro autor, ¿cuál elegirías y por qué?
– Cualquiera de esos finales felices, limpios y maniqueos que no remueven conciencias y asientan la idea de un orden social mesiánico. Nadie es tan bueno ni tan malo para no merecer una redención y un castigo a la vez.
Debes estar registrad@ para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.