Narrar la vida de los otros resulta una necesidad ineludible para quien desea explorar su propia existencia. Por eso, a lo largo de la historia de la literatura encontramos numerosos libros de semblanzas. Autores que desean saber cómo han vivido otros para entender cómo vivir mejor. Esa es la idea. Pensando en ese deseo de interrogarnos en lo íntimo he reunido aquí cuatro libros de semblanzas y memorias que me parecen interesantísimos y que, creo, no sólo pueden servirnos para conocer acerca de las emociones ajenas sino que también pueden ser una buena guía para resolver intrigas sobre nuestra propia forma de sentir y vivir.
Contra toda esperanza, de Nadiezhda Mandelstam
Algunos relatos resultan tan conmovedores, que cuesta recuperarse de ellos. Al leer «Contra toda esperanza», de Nadiezhda Mandelstam (Acantilado), en esta bellísima traducción de Lydia Kúper, seguramente te ocurrirá algo así.
Encontramos aquí una historia de amor protagonizada por el poeta Ósip Mandelstam. Los detalles de su vida ante de la deportación por el régimen soviético y el final de su vida en Siberia. Es un relato lleno de melancolía pero también de tristeza que habla sobre la pesada carga de dolor de una viuda que amaba y no le permitieron continuar disfrutando de esa relación. Nos permite también acercarnos a la poesía de uno de los autores más grandes del siglo XX.
Entre las cosas que no deberíamos dejarnos fuera del análisis se encuentra la lucidez con la que Nadiezdha construye un discurso contra la barbarie y a favor del conocimiento y de la paz sin poner por encima del mensaje su propio dolor. Es además un libro fascinante para descubrir una época significativa en la historia de Rusia y de todo Occidente, que puede servirnos también para explorarnos y reflexionar en torno a nuestro propio tiempo.
Vidas de santos, de Antonio Lucas
La sensibilidad con la que en «Vidas de santos», Antonio Lucas (Círculo de Tiza) se acerca a la biografía de estos personajes es magnífica. Quienes no le hayan leído en El Mundo es posible que lo ignoren, para eso está este libro, para mostrarnos a un periodista con arte y oficio que transmite de forma certera las emociones y los acontecimientos de la vida de personalidades del mundo de la literatura y alrededores.
Se pasean por estas páginas Susan Sontag, Gerda Taro, Sid Vicious,Jayne Mansfield, Carson McCullers,y Carlos Oroza, entre muchos otros personajes. Quiero destacar las tres semblanzas que más me fascinan y, creo, son las palabras más acertadas , nobles y estéticas q se han escrito en nuestro idioma sobre estas personas. Me fascinan la descripción del dolor en Anna Ajmátova, del prodigio nervioso y doliente en Arthur Rimbaud y del doblegarse a la autodestrucción en Billie Hollyday. Tres vidas fascinantes descritas con maestría, talento literario y oficio periodístico.
Si quieres saber más sobre este libro, te dejo el enlace a la reseña que publiqué cuando salió.
La hermana menor, de Mariana Enríquez
Sobre Silvina Ocampo se han escrito muchas palabras, ningún relato me ha resultado más conmovedor que este texto corto pero contundente de Mariana Enríquez. «La hermana menor» (UDP Ediciones) nos permite conocer las vicisitudes, los temores y la mirada teórica y literaria de una de las grandes autoras argentinas.
Es un relato en que la voz de la autora se funde con la de Silvina, con extractos de sus diarios, de sus cuentos, y nos permite obtener una semblanza lúcida y contundente. Una mirada a una época,. a la tradición literaria del Río de la Plata y a todo lo que rodeaba la literatura de aquella época. Asimismo nos permite descubrir esa extraña relación que hubo entre las hermanas Ocampo que siempre pareció dejar a Victoria en un mejor lugar que a su hermana pequeña.
¡Un relato fabuloso para descubrir a ese monstruo hermoso que fue Silvina Ocampo!
Si te interesa, puedes echarle un vistazo a esta reseña que publiqué hace unos años sobre este libro hermoso de la Enríquez.
Primeras personas, de Juan Cruz Ruiz
En «Primeras personas» el periodista Juan Cruz Ruiz (Alfaguara) reconstruye su relación con una serie de personas, la mayoría de ellas del ámbito literario y nos regala una semblanza íntima, cercana y lúcida sobre cada una de ellas. Entre los protagonistas se encuentran Günter Grass, Patti Smith, Manuel Padorno, Tomás Eloy Martínez y Carmen Ballcells; por nombrar tan sólo a unos poquitos.
Algunos de los textos son realmente maravillosos. Entre mis favoritos se encuentran el de Ana María Moix, Manuel Rivas, Orhan Pamuk y un delicioso texto de extravío titulado «Pánico en el vagón». Asimismo, la mirada de Juan Cruz sobre libros, autores y paisajes es realmente alucinante. Un libro precioso que nadie debería perderse.
Publiqué hace unos días una reseña sobre esta obra. Y muy pronto, la entrevista con su autor. ¡Quédate atento!
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