Alejandro Gallo, de policía a escritor

El género policíaco y de suspense es el que da forma a toda la bibliografía del leonés Alejandro Gallo. Y es que no podía ser de otra manera pues este autor ejerce como policía por lo que ¿quién mejor que él para desarrollar novelas que giran entorno al mundo de la delincuencia y la criminalidad?

Por este motivo, es innegable que la experiencia que posee y los conocimientos que le habilitan como profesional dentro de los Cuerpos y Fuerzas de la Seguridad del Estado son los que avalan la calidad de unos trabajos narrativos que mantienen al lector en todo momento en una situación de intranquilidad y de nerviosismo por ver cómo transcurre la historia, cómo se desarrolla la investigación y quién es el criminal que se busca.

Asesinato de un trotskista, que se publicó en el año 2004, es uno de los libros más interesantes de Gallo. El mismo gira entorno al asesinato de un militante trotskista, Leroux, durante una manifestación en Madrid.

Este hecho será el que ponga en jaque a la Policía que comenzará una intensa investigación que, en principio, le encaminará a poner en el punto de mira a un grupo de ultraderecha. Sin embargo, el jefe del Cuerpo, Martín, no tiene tan claro que dentro del seno de aquel vayan a encontrar al culpable. Por eso decidirá abrir otras líneas de investigación que depararán muchas sorpresas.

Crímenes del pasado

La propia tierra del escritor que nos ocupa, León, es la que se convierte en escenario del crimen en la novela titulada Una mina llamada Infierno. En el año 2005 fue cuando vio la luz la misma que narra cómo en la cuenca minera de dicha zona comienzan a producirse una serie de misteriosos asesinatos que las autoridades intentarán esclarecer teniendo una única pista: todas las víctimas habían trabajado en la mina Infierno.

Partiendo de ello, se decidirá encontrar nueva información que dirija hacia el culpable de las muertes y para conseguirlo lo que se hará será infiltrar en la mina a un policía, al inspector Ramalho da Costa, conocido como El Trini.

Personaje este que se convertirá nuevamente en el protagonista de otro de los libros más interesantes de Alejandro Gallo. Nos estamos refiriendo a La última fosa, de 2008.

En esta ocasión dicho policía deberá enfrentarse al esclarecimiento de unos crímenes del pasado. Y es que en el Valle Negro se produce el hallazgo de una fosa común donde aparecen los cadáveres de varios republicanos que fueron fusilados durante la postguerra, pero no sólo eso. Debajo de sus cuerpos aparecerá también el de una joven de tan sólo dieciséis años que desapareció en el año 1934.

Este hecho llevará a que la familia de la chica se ponga en contacto con da Costa para que descubra lo que sucedió. Un reto que este llevará a cabo después de que descubra un nuevo asesinato y que supondrá que tenga que remover los momentos más trágicos, horrorosos y crueles de un pasado donde el país se dividió en dos. Un momento que desencadenaría la Guerra Civil en la que el ser humano dejó a un lado su alma para luchar por su supervivencia a toda costa, y eso trajo consigo venganzas, hambre, pobreza, crueldad, lucha por los sueños y principios»�



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