Te recomendamos la lectura de estas dos escritoras contemporáneas que se levantaron contra la imposición canónica y supieron construir obras contundentes y libertarias.
Desde hace un tiempo vengo notando que si a las mujeres nos cuesta tanto dar a conocer nuestro trabajo resulta aún más difícil conseguir visibilidad si has declarado tu sexualidad no convencional. Y no es que me crea especial por pensarlo o que considere que soy la primera en articularlo, pero sí pienso que muchos lo saben y no se lo toman tan en serio como para convertirlo en denuncia, y no quiero formar parte de ese grupo. Si escribes en el buscador «escritoras lesbianas», encontrarás una larga lista de buenas autoras, pero de fotografías en blanco y negro, es decir, escritoras de otra época. No se promociona las voces de autoras contemporáneas. Inicio con este artículo una mini serie en la que escribiré sobre algunas escritoras que me gustan especialmente y que considero deberían recibir un mayor reconocimiento. Comienzo con dos a las que admiro profundamente: Pilar Bellver y Silvia Molloy.
Pilar Bellver
De las autoras contemporáneas, Bellver es una de las que más ha sabido convencerme. En su obra hay una denuncia lucidísima a los abusos del sistema, un mensaje anticapitalista, antireligioso y antipatriarcal que se sustenta en un amplio conocimiento de la tradición, a la que la autora ha sabido reinterpretar, darle la vuelta, y ofrecernos una nueva mirada sobre el mundo y sobre la literatura.
La obra de Bellver es dilatada, pero podríamos mencionar «Veinticuatro veces», «A todos nos matan antes de morir», «A Virginia le gustaba Vita» y «V y V. Violación y venganza», como las más destacadas.
Con anterioridad hice una reseña sobre «V y V. Violación y Venganza» y a propósito de esa lectura conversé con la autora. Las respuestas de Bellver son absolutamente lúcidas. Sus palabras nos ofrecen una nueva luz con la que mirarnos y describirnos. Personalmente, descubrirla fue renovar mi pasión por la literatura como el único escenario posible donde ser libres y felices. Que nadie se la pierda.
Silvia Molloy
La obra de Molloy es diferente de la de Bellver, en ella la literatura es una imagen que se va componiendo poco a poco y que nunca llega a despejarse del todo. Sin duda es una de las maestras del género breve.
Antes de convertirse en escritora, Molloy era una gran lectora. Le leí decir en una entrevista que cuando leía le gustaba poner su voz en los personajes, porque la única forma que en la que entiende la lectura es encarnando la voz del hablante y su dicción. Quizá esto explique su impresionante capacidad para contarnos historias y mostrarnos personajes inolvidables.
A Molloy se la considera una de las pioneras en desarrollar una obra lésbica contundente, en una época en la que todavía no se hablaba mucho de la libertad sexual. Y eso no es todo: al leerla descubrimos narraciones exquisitas y fabulosas. Si bien sus historias tienen un alto contenido autobiográfico, su capacidad imaginativa y su fabuloso sentido del humor le permitieron dar con obras contundentes que revolucionarían la literatura.
«En breve cárcel», «El común olvido» y «Vivir entre lenguas», son algunas de sus obras de ficción más interesantes. Pero Molloy también ha producido interesantes ensayos en los que reflexiona sobre la literatura, lenguaje y homosexualidad. «Poéticas de la distancia. Adentro y afuera de la literatura argentina» y «Poses de fin de siglo. Desbordes del género en la modernidad», son dos claros ejemplos de su exquisito trabajo.
Pilar Bellver y Sylvia Molloy son dos autoras que han sabido contribuir a la literatura con miradas auténticas y una rigurosidad estética que las vuelve todavía más necesarias. Te invitamos a leerlas y disfrutar de sus interesantes obras.
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