«Cinco semanas en globo» de Julio Verne

«Viajes extraordinarios». Así tituló Julio Verne a un grupo de novelas en las que nos llevó por terrenos aún inexplorados. Un ciclo que abrió con «Cinco semanas en globo», y que, al igual que la gran mayoría de sus obras, no envejece; por eso, cuando te asomas nuevamente a su universo, te descubres más joven y más viva.

Hoy, en nuestro ciclo del desván de los libros perdidos releemos esta obra impresionante del escritor francés. ¡No dejen de darle una nueva oportunidad!

Redibujar los mapas

«Cinco semanas en globo» relata el viaje-aventura que realizan tres personajes: el Dr Samuel Fergusson, Dick Kennedy y Joe Wilson. Desde el primer párrafo podemos notar que aunque el libro tiene poquísimos personajes, como son tan distintos, entre sí ofrecen un gran espectro de posibilidades a la narración y le permiten al autor tocar diversos y variopintos temas.

Tres amigos que parten en un globo aerostático con un objetivo bien claro: alcanzar el sitio donde nace el Río Nilo, ahorrándose los problemas a los que han tenido que enfrentarse todas las expediciones anteriores. Como hasta ese momento estos viajes se realizaban por mar o tierra, exponían a los viajeros a un sinfin de peligros. El Dr Fergusson está convencido de que si el viaje se hace por el aire es posible, en menos tiempo, alcanzar las costas del Nilo sin tener que preocuparse por las dificultades que presentan los terrenos que se encuentran bajo la atmósfera. El globo, de nombre «Victoria», ha sido diseñado con lujo de detalle y presenta características inusitadas para lo que eran las naves de este tipo entonces.

El objetivo principal de la expedición es dibujar la parte del mapa que falta, para saber cómo es el final de África y dónde nace uno de los ríos más importantes del continente. Acercarse a África, sorteando los peligros que representaba tamaña aventura, era otra de las metas de estos aventureros.

A lo largo de la aventura los viajeros se ven obligados a enfrentar un sinfín de situaciones difíciles y tienen que usar su ingenio para resolver acertijos y evitar que la dura naturaleza les juegue en contra. Tienen que conocer la fuerza y dirección de los vientos para saber utilizarlo para elevar el globo, así como descubrir cuáles son los mejores sitios donde atar la nave mientras intentan conciliar el sueño. Entre otras cosas que aprenden durantr ma travesía.

La fluidez de la narrativa de Verne y su extraño conocimiento del mundo exterior vuelven sumamente amena la lectura y nos permiten zambullirnos en un ambiente absolutamente realista y palpable.

Los viajes extraordinarios de Verne

Los «Viajes extraordinarios» de Julio Verne y por ende, esta novela, se caracterizan por presentar un estilo claro y bien definido y por saber jugar equilibradamente con la acción y el misterio. Con ellas Verne creo una nueva forma de novela, donde la fantasía se cuela completamente llegando a transformar la realidad. Debido a ello el escritor francés se ganó el título de padre de la ciencia ficción.

Con «Cinco semanas en globo», por lo tanto, no sólo fundó un nuevo ciclo sino una nueva manera de entender la ficción y se catapultó de forma irremediable como uno de los escritores imprescindibles de la literatura universal.

Como el resto de los protagonistas de Verne, Fergusson se caracteriza por su voraz ambición de poner realidad a la nebulosa realidad que habita en los confines del universo. Quiere descubrir más y mejores territorios y no le teme a nada. Esta cualidad de sus personajes vuelve sumamente interesante la lectura, porque llega a contagiarte ese deseo de ver y ser mundo.

No obstante, a diferencia de otras obras de Verne, como «La isla misteriosa» o «Veintemil leguas de viaje submarino», en esta primera entrega de sus viajes extraordinarios aún echamos en falta la faceta más misteriosa de Verne y esa cualidad para contar historias en las que siempre está ocurriendo algo. Sea como sea, pienso que es muy importante leerla teniendo en cuenta que con ella abrió la que sería una saga que cambiaría el curso de la literatura para siempre, y a la que muchísimos autores posteriores le deben origen.