Muchos son los escritores que existen en todo el mundo y cada uno tiene sus propias particularidades o señas de identidad. Precisamente el que ahora nos ocupa es conocido como el autor de los cuatro nombres. Nos estamos refiriendo al francés Jean Paul Didierlaurent (1962).
En un verdadero referente de la literatura de su país e incluso del mundo se ha convertido esta pluma, que tiene en su poder importantes reconocimientos tales como el Premio Hemingway, que lo ha obtenido en dos ocasiones, 2010 y 2012.
Galardones que son una manera de darle relevancia y valor a las narraciones creadas por este escritor, que abandonó la publicidad e incluso su trabajo en una empresa telefónica para centrarse por completo en la literatura. En concreto, entre las más exitosas y más alabadas se encuentran las siguientes:
El lector del tren de las 6:27
En el año 2014 fue cuando vio la luz esta obra, que toma como protagonista a Guibrando Viñol. Se trata de un hombre de apariencia y vida mediocre que trabaja controlando una máquina (la Cosa) que se encarga de destruir todos esos libros que ya nadie quiere leer. Sin embargo, siempre esa máquina expulsa algunas páginas que han conseguido permanecer intactas y estas son las que recoge el personaje.
A diario toma esas páginas supervivientes y aprovecha el viaje que cada mañana realiza en tren a las 6:27 horas para poder leerlas. En concreto, las lee en voz alta para que puedan ser disfrutadas también por el resto de pasajeros, entre los que están un vigilante de seguridad, un mutilado o incluso una princesa…
Todos esos y especialmente el protagonista verán cómo un día todo cambia. Y es que este leerá una singular obra literaria que hará a que su vida se transforme desde ese momento y para siempre.
El resto de sus vidas
Otra de las obras que te recomendamos que leas de Jean Paul Didierlaurent es la que tienes ahora delante. El pasado año 2017 fue cuando se publicó la misma que viene a girar en torno a la dualidad vida-muerte.
Ambrose es el nombre del protagonista. Se trata de un chico atractivo, bondadoso y de buena familia que trabaja embalsamando cadáveres de personas. Es un verdadero profesional, conoce a fondo su labor y pone en práctica todos los recursos que tiene a su alcance para que sus “clientes” se encuentren en el mejor estado posible hasta que el velatorio llegue a su fin.
Pronto conocerá a unos personajes que harán que cambie su vida. En concreto, conocerá a Monelle, una cuidadora de ancianos, y a uno de esos mayores que responde al nombre de Samuel. Este es un judío que consiguió sobrevivir a uno de los campos de concentración nazi al que le ha sido diagnosticada una enfermedad terminal. Precisamente por eso tomará la decisión de viajar hasta Suiza para que le sea practicada la eutanasia.
Monelle y Ambrose decidirán acompañar a Samuel en ese viaje que será muy especial para los tres, a cada uno por unos motivos concretos. Entre cosas, conseguirán averiguar que quizás la enfermedad del anciano no es la que le habían diagnosticado.
¿Qué te parecen estas propuestas del citado autor galo?
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