Curiosidades sobre Jorge Guillén

La Generación del 27 es una de las generaciones de artistas más importantes de la literatura española. Y de esa forma parte el poeta vallisoletano Jorge Guillén (1893 – 1984), autor de obras tales como Cántico (1950), Según las horas (1962) o Al margen (1972).

Hoy queremos adentrarnos un poco más en su figura y en su obra. Por ese motivo, a continuación, te vamos a dar a conocer algunas curiosidades sobre esos aspectos:

Su nombre completo era Jorge Guillén Álvarez.
Estudió en Valladolid, pero luego se trasladó hasta Madrid para estudiar Filosofía y Letras. Durante el tiempo que pasó en la capital, se alojó en la afamada Residencia de Estudiantes, en la que también se hospedaron Federico García Lorca, Luis Buñuel o Salvador Dalí. Eso sí, acabó licenciándose en la Universidad de Granada.
En 1929, junto a figuras como José Ballester Nicolás, fundó la revista Verso y Prosa.
Uno de sus más importantes poemas es el que lleva por título Polifemo.
En el año 1934 se doctoró en la Universidad de Madrid con un trabajo sobre el poeta del Siglo de Oro Luis de Góngora.
Uno de sus mejores amigos fue el también escritor Pedro Salinas (1891 – 1951), autor de obras como La voz a ti debida (1933) o Razón de amor (1936).
Además de poeta, ejerció como crítico e incluso como profesor universitario.
Al inicio de la Guerra Civil Española, Jorge Guillén fue encarcelado durante un breve tiempo en Pamplona.
Fue contrario al régimen dictatorial impuesto por Francisco Franco en España. Por ese motivo, se exilió en 1938 y gran parte de ese tiempo lo pasó en Estados Unidos. Eso sí, no podemos pasar por alto que poco después del inicio de la contienda tuvo un acercamiento a Falange, al llevar a cabo la traducción de Canto a los mártires de España, obra de Paul Claudel. De ese citado acercamiento se arrepentiría toda su vida.
Se casó en dos ocasiones. La primera con Germaine Cahen, a la que conoció en sus viajes por Europa y con la que tuvo dos hijos: Claudio, especialista en literatura, y Teresa. La segunda, después de haberse quedado viudo, fue con Irene Mochi-Sismondi.
Muchas son las denominaciones que le han dado a Jorge Guillén y a su obra. Así, para algunos fue el digno discípulo de Juan Ramón Jiménez y para otros su trabajo era «poesía fría», porque dejaba de lado los sentimientos.
Tras la Guerra Civil sus primeros libros abordaron cuestiones tales como el dolor, la miseria o la muerte.
En Estados Unidos fue miembro de la Asociación AAAS, la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia.
En 1977 recibió el prestigioso Premio Cervantes. En el discurso que dio al recibir el mismo destacó que el país asumía un nuevo rumbo hacia la democracia, porque ese galardón se le había otorgado a él que fue contrario a Franco. Precisamente manifestó eso diciendo:
Jorge Guillén está considerado el autor más reivindicativo de la Generación del 27.