A pesar de contar con una bibliografía poco extensa, la escritora argentina Betina González ha logrado obtener importantes galardones por la misma. Así, tiene en su poder tanto el Premio Clarín 2006 como el Premio Lozano de la Universidad de Pittsburgh o el Premio Tusquets de Novela.
Se trata de reconocimientos que vienen a dejar patente su calidad narrativa, lo interesante de sus historias y el aire fresco que ha supuesto para la literatura de su país. Todas estas cualidades pueden percibirse en sus trabajos y especialmente en los que te mostramos a continuación:
Arte menor. La ópera prima de la autora fue esta, publicada en 2006 y ganadora del mencionado premio Clarín, que gira entorno a la figura de Fabio Gemelli. Él es un escultor de poco éxito, concretamente porque está carente de genialidad, que además tampoco ha triunfado en su vida personal pues no ha sido buen padre y repetidamente ha cometido infidelidades.
Ese personaje muere al comenzar el relato y luego continúa varios años después cuando su hija Claudia se topa con una de las esculturas que realizó su progenitor. En ella se representa a una mujer, una posible amante de aquel, y eso hace que la joven sienta especial interés por descubrir quién era ella y también cómo era su padre en realidad y qué vida tuvo.
Por eso, publica un anuncio en el periódico fingiendo querer comprar obras del escultor. Eso hará que se pongan en contacto con ella una gran variedad de féminas que formaron parte de la existencia del fallecido.
Las poseídas. En el año 2013 fue, sin embargo, cuando Betina González decidió publicar esta otra novela, ganadora del ya citado Premio Tusquets, que toma como protagonista a Felisa Wilmer. Ella es una joven que ingresa en un colegio religioso femenino de Buenos Aires.
Ese cambio de vida será significativo para la muchacha, ya que viene de vivir en Londres donde ha contado con una libertad que la ha hecho convertirse en alguien demasiado rebelde. Por eso, ha sido internada en el centro, para que ponga los pies en el suelo y deje de ser caprichosa y con carácter.
En el colegio establecerá pronto amistad con López. Ambas congeniarán a la perfección desde el primer momento, vivirán aventuras juntas, disfrutarán con las singulares historias que rodean al centro e incluso tendrán algunas experiencias “peligrosas”.
Todo ello permitirá que las amigas se conozcan mejor y descubran sus almas. Así, López conocerá la complicada vida de Felisa: es huérfana, pues su madre falleció en un accidente, y está al cargo de su abuela. Dos circunstancias personales estas que, unidas a otras que se irán desvelando poco a poco en el relato, permitirán ir desentrañando el porqué del carácter rebelde de la chica así como de su excentricidad o su apasionamiento por las actitudes suicidas.
Además de estas dos novelas, también merece la pena disfrutar de la lectura de un tercer trabajo de la pluma argentina que nos ocupa. Se trata del libro de relatos y cuentos titulado Juegos de playa, que se publicó en 2008 y que, por ejemplo, nos acerca a la vida de una niña durante la Guerra de las Malvinas.
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