El referente ético del 15M

Este año viene cargado de noticias tristes. Primero fue la del fallecimiento de Jakob Arjounis, James Herbert y Sthépan Hessel.

En la tarde de ayer una noticia similar nos ha tumbado, esta vez el fallecido es José Luis Sampedro Saéz, sin duda uno de los grandes novelistas de España. Cabe mencionar que fue uno de los primeros intelectuales españoles en sumarse a las ideas del 15M y que, además prologó, una de las ediciones de la obra «Indignaos» de Hessel. Nuestro mínimo homenaje en Poemas del Alma para este extraordinario intelectual.

Breve biografía de Sampedro

José Luis Sampedro nació en Barcelona el 1 de febrero de 1917 y falleció en Madrid ayer, 8 de abril de 2013. Pese a ver cursado estudios superiores en economía y trabajar como profesor universitario de diferentes cátedras, su verdadera fama le vino cuando se presentó al mundo como novelista.

Sus ideas humanistas le llevaron a construir una forma de entender la economía que se adecuara a las mismas. Así abogó por una economía solidaria, que contribuyera al desarrollo de la dignidad de las personas que forman parte de una sociedad. De sus obras puede desprenderse esa mentalidad, tan pendiente de las problemáticas sociales de su tiempo, que también puede encontrarse en su labor social.

Comenzó sus andanzas como escritor, de forma paralela a su actividad profesional como economista. Y, una vez que se jubiló, se entregó completamente a la escritura y a la reinvindicación de las ideas sociales.

Entre sus obras más importantes pueden mencionarse «Octubre», «La sonrisa etrusca» y «La vieja sirena». En todas ellas puede notarse la clara visión de Sampedro sobre la situación social y económica de Occidente, donde la decadencia moral y el neoliberalismo se han sebado la vida de las sociedades, a través del capitalismo salvaje.

En 2011 se le otorgó el merecidísimo Premio Nacional de las Letras. Posiblemente, porque ya no había forma de evadir semejante galardón; en un momento en el que Sampedro era un activista popular, aclamado por el pueblo como el referente ético y moral indiscutible del 15M.

Referente moral del 15M

Sampedro de manifiesta ideología marxista, comenzó sus pasos en el mundo de la cultura escribiendo extensos tratados y críticas sobre el capitalismo y las decisiones económicas impuestas por los modelos neoliberales. Sin embargo, en su interior llevaba un novelista que pugnaba por salir y, cuando finalmente decidió inclinarse por esta labor, consiguió publicar y recoger muchos éxitos.

Más tarde, pasó a formar parte de la lista de los numerosos autores que se leen pero que tampoco sobresalen. Sin embargo, es un hombre que no ha cesado de trabajar y, en los últimos años, se había abocado a la lucha social, uniéndose a las ideas de movimientos populares a favor de la igualdad y la construcción de un mundo más justo.

Su apoyo en edad temprana al 15 M posiblemente permitió que dicho movimiento adquiriera más relevancia; puesto que, que un pensador de la envergadura de José Luis, con tanta trayectoria de por medio y una fe ciega en esas ideas, apoyara la causa, demostraba que indudablemente había algo más en ese movimiento que la mera idea de sublevarse. Ideas que, si se manifestaban con claridad, podrían llevar a nuestra sociedad a un estadio superior.

La libertad como base para la democracia

Uno de los grandes lastres en la historia de la humanidad han sido las dictaduras y las ideologías dogmáticas; pero por suerte, también en las diferentes épocas hemos contado con personas con la valentía de Sampedro, que nos ayudan a encontrar el buen rumbo y a luchar para defender nuestros derechos y nuestras libertades.

En más de una ocasión, Sampedro se postuló en contra del pensamiento impuesto a través de la enseñanza religiosa, en el que los seres humanos parecen estar destinados a cumplir los designios de un dios. Sin ir más lejos, en muchas de sus obras expresa, en una desesperada lucha por la libertad en todos sus aspectos, que ésta solo puede alcanzarse a través de una educación laica; donde los individuos cuenten y sus ideas deban ser atendidas y respetadas por su entorno social.

José Luis Sampedro, lúcido hasta sus últimos minutos de vida, nos ha dejado un legado impresionante de lucha férrea. Seguramente, ha sido uno de los indiscutibles personajes intelectuales de nuestro siglo, a quien le estaremos siempre agradecidos.