«El resplandor» (King VS Kubrick): Libros de Película

Arrancamos con la primera entrega oficial del ciclo Libros de Película. Como les he contado en la introducción, en esta sección iré publicando textos sobre los puntos de vistas que han despertado ciertas adaptaciones de novelas en el público lector-cinéfilo.

Para empezar he escogido una película muy conocida, de un director adorado por muchos y sobre una historia también conocida, de un autor que tiene sus buenos lectores y sus detractores. Se trata de «El resplandor» de Stephen King, cuya adaptación fue realizada por la mirada cinematográfica de Stanley Kubrick.

Una película ¿adelantada a su tiempo?

Stanley Kubrick es para muchos uno de los directores más importantes del Siglo XX. En sus películas, entre las que se destacan «La naranja mecánica», «Espartaco» y «El resplandor», podemos encontrar una gran carga simbólica y un estilo propio innegable. En diversas entrevistas Stanley mencionó a Max Ophüls y Sergéi Eisenstein como los dos artistas que más le han influido y en quienes se ha apoyado a la hora de trabajar su propio estilo cinematográfico. Sin lugar a dudas, su forma de hacer cine fue atípica y gozó de muchísimos aplausos tanto como de despiadadas críticas.

En lo que respecta a su adaptación sobre «El resplandor» de King, para muchos es una película adelantada a su tiempo, en cuanto a que Kubrick se basó en técnicas poco utilizadas hasta el momento e intentó jugar con la música y los colores de una forma inaudita. Y es cierto que presenta escenas llamativas e impactantes.

Pero aunque a nivel técnico muchos cineastas puedan darnos cátedra acerca de la perfección alcanzada por Stanley en esta película; sin embargo, ¿no se espera del buen cine que sepa contarnos una historia? Esta pregunta surge al terminar de ver esta película y descubrir que muchos de los elementos y símbolos utilizados en ella no podrían comprenderse si no se ha leído previamente el libro. Esto, desde mi humilde punto de vista, es un fallo porque la película debería bastarse por sí sola para contarnos la historia. Y no lo consigue.

Por otro lado, las licencias que se tomó el cineasta han molestado a King quien en varias ocasiones ha opinado negativamente al respecto de esta adaptación. Esta historia que es una de las responsables de que su prestigio como escritor alcanzara las doradas listas, es también una de las novelas a las que les tiene más cariño y por eso el trabajo de Kucrick le molesta, porque según él no le hace justicia a la obra ni a los personajes.

3 puntos negativos de la adaptación de Kubrick

La adaptación de «El resplandor» de Stanley Kubrick presenta tres elementos que la alejan muchísimo no sólo de la historia de King sino también de la lista de películas que los buenos lectores recomendaríamos. Más que errores son inexactitudes que ponen en tela de juicio el trabajo del cineasta y que se encuentran vinculados a la forma en la que trabaja y presenta el comportamiento de los personajes. Indudablemente su mirada está puesta en los escenarios (imágenes, música, colores) y esto lo lleva a despreocuparse de las miradas, gestos y actitudes de los personajes. Si tenemos en cuenta que «El resplandor» de Stephen King es una novela que combina de forma mágica una construcción minuciosa de los personajes y los hechos que se desarrollan, parece que fallar en este aspecto podría considerarse una metida de pata peligrosa.

1- No existe progresión en el comportamiento de los personajes.

En «El resplandor», Stephen King trabaja con minucioso detalle el progresivo malestar que va tornándose cada vez más violento y descabellado a medida que pasan más días en el hotel. A medida que leemos comenzamos también nosotros a dudar de lo que es real y lo que existe sólo porque los personajes lo sienten-ven. La soledad y el aislamiento son dos elementos fundamentales a los que se aferra King para pintarnos las emociones y las situaciones que viven los tres habitantes del establecimiento. En la película, en cambio, el desequilibrio mental de los personajes es visible desde la primera escena. Cuando Jack está en la entrevista con el dueño del hotel ya podemos ver en él a un hombre desquiciado; esto hace que su comportamiento posterior no nos sorprenda y le quita fuerza a la trama.

2- Se percibe una mirada misógina en el trato hacia el personaje femenino.

Otro de los puntos negativos a destacar es la tendencia misógina de su director. La forma en la que trabaja el personaje de Wendy Torrance, protagonizado por Shelley Duvall, deja mucho que desear. Nos encontramos con una mujer desquiciada y chillona que encarna las características estereotípicas de la mujer que intentan promover los discursos patriarcales. Una mujer incapaz de valerse por sí misma, de tomar decisiones y de entender la situación que la rodea. En el libro, sin embargo, tenemos a una mujer que ha sufrido el abandono y la culpa en la primera infancia y que, pese a ello, ha intentado crear una familia y sostenerla. Y es por esa necesidad de mantenerse en pie y sostener a los suyos que confía en que Jack, su esposo, pueda superar sus problemas con el alcohol y lo anima a tomar ese trabajo en el hotel.

Wendy posee una personalidad ambigua pero tiene una gran fortaleza interior que le ha servido para afrontar sus miserias. Lucha constantemente, sin embargo, con una inseguridad profunda y esto la lleva a temer el hundimiento. En el libro se explica exactamente por qué actúa como lo hace, a qué le tiene miedo, y también a través de la lectura podemos comprender por qué el hotel la transforma de la forma en la que lo hace. Todos detalles que en la película permanecen silenciados para dar lugar a una mujer desesperada y desquiciada. El propio King dijo que el personaje de Shelley Duvall es el más misógino de la historia del cine.

3- No se trabaja en profundidad la relación entre padre e hijo.

Otro elemento mal conseguido en la película es la relación del padre y el hijo. Mientras en el libro King muestra con especial énfasis el deseo de Jack de que su hijo Danny sea feliz y su preocupación por saber cómo se siente en todo momento (irrigado por la culpa de haberlo maltratado unos años atrás), en la película da la sensación de que el padre aborrece al pequeño y cada vez que le ve desea que desaparezca.

Por otro lado en el libro se trata de forma profunda el alcoholismo de Jack y su pasado; los cuales influyen muchísimo en el trato que le da al niño puesto que su mayor deseo es ser para Danny un padre bueno, para oponerse rotundamente a lo que él tuvo: ofrecerle una infancia alegre y pacífica, cosa que le resulta muy difícil debido a los muchos fantasmas que viven en él. El hotel y como dije antes el aislamiento no colaboren con que Jack pueda llevar a cabo sus deseos. Pero todo esto no intenten verlo en la película donde Jack es un hombre desquiciado del que nadie se enamoraría y que ninguno desearía tener como padre.

Libro 1 – Película 0

Stephen King es un autor odiado y amado, en iguales proporciones. En el mundo de la literatura existe un cierto rechazo hacia este hombre que es capaz de publicar un par de libros al año si se lo propone y que ha ofrecido historias inauditas e inolvidables. Al margen del punto de vista que cada uno pueda tener en torno al pulimento de sus textos y a la repetición de una fórmula que le ha funcionado, lo que se le pide a un escritor es que sepa contar historias, y King parece que sabe cómo hacerlo.

Quizás por eso deberíamos darle una oportunidad. «El resplandor» es una historia que se centra en la forma en la que reaccionamos ante los estímulos externos; tanto del mundo real como del mundo interior, esa parte profunda de nosotros que a veces intentamos negar o deseamos bloquear porque nos hace daño, y desde mi humilde punto de vista, la forma en la que King encara un tema tan delicado y difícil de poner en palabras es genial.

Cierto es que no podemos esperar encontrar nuestras novelas favoritas pintadas al dedillo en las películas, sino más bien la mirada que un cineasta ha tenido sobre ellas. Pero cuando una película contradice tanto las bases del hilo argumental, como es el caso de esta adaptación, quizás deberíamos cuestionarla. Por mi parte, la experiencia lectora ha sido muy estimulante y la película no me ha gustado nada. Y ustedes ¿han visto o leído esta historia? ¿Qué opinión les merece?

Volveremos pronto con otro texto similar sobre adaptaciones cinematográficas de historias literarias en este ciclo «Libros de Película».