La lectura de La cuerda rota, poemario con el que José Ignacio Montoto se hizo con el Premio Andalucía de Poesía Joven, despertó en mí el interés de saber quién estaba detrás de esas letras.
Lo que más llamó mi atención fue que la etiqueta de «joven» adornara un libro que se presentaba con una rotunda madurez, construido con una voz femenina que se postula contra las leyes del patriarcado y que nos invita a mirar por esa hendija por la que debemos trabajar para conseguir hacer de ésta una sociedad más igualitaria y justa.
De momento les debo mi lectura de este poemario (que vendrá pronto, ¡lo prometo!). No obstante, para ir disfrutando de lo que Ignacio Montoto tiene para decir, les dejo la entrevista que con suma amabilidad ha tenido el decoro de permitirme. Espero que la disfruten.
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— Hay quienes creen que antes de leer a cualquier autor deberíamos conocer lo que lo motiva a sentarse a escribir. ¿Por qué escribe José Ignacio Montoto? Y ¿por qué deberíamos leerle?
— Muy buenas, Tes, en primer lugar agradecerte la ocasión de aparecer por este rinconcito. Escribo de modo natural, entiendo la escritura como el mejor medio de transmisión de las ideas, el fin último para obtener una conclusión. No sé si deberíais leerme o no existiendo tantos autores de obligada lectura, mucho antes que a mí.
— ¿Qué clase de lector eres? ¿Te gusta releer? ¿Rayas los libros? ¿Qué tipo de lecturas te atraen más? ¿Poesía, novela, ensayo? ¿Cuáles son tus autores de referencia?
— De un tiempo a esta parte soy un mal lector, pues carezco de tiempo para poder sentarme y leer con tranquilidad. Acumulo muchas lecturas pendientes sobre mi mesa. Actualmente me atraen las voces femeninas tanto en poesía, novela como ensayo. Lecturas que van desde Safo, pasando por Virginia Woolf, Anne Carson, Virginie Despentes, Elvira Navarro, Marta Sanz, Mary Jo Bang, Jorie Graham, Louise Glück, Chantal Maillard, Maria Ignátieva, Tracy K. Smith, Birgitta Trotzig o Anne Sexton, entre otras.
— ¿Crees que hubo algún hecho crucial en tu vida que te haya volcado hacia la poesía para hallar en ella consuelo o el espacio para explorarte y conocerte?
— No sé si hechos cruciales, sí hechos puntuales, en Cádiz tuve un profesor que de 3º a 5º de EGB, dentro de sus horas lectivas, nos enseñó a leer comprensivamente, a escuchar música clásica y nos marcó mucho culturalmente a mí y a todos mis compañeros y compañeras. Luego la vida te va marcando un rumbo y esa exploración que apuntas se va produciendo de manera natural y, claro, de algún modo influye a la hora de elegir uno u otro camino a la hora de expresarte.
— Pese a que eres un poeta joven ya tienes publicados varios trabajos. ¿Has conseguido dar más visibilidad a tus obras anteriores a partir de la obtención del Premio Andalucía joven?
— A ver, soy joven porque la UNESCO dice que eres joven hasta los 35 años, pero… No sé si a partir de La cuerda rota se ha dado más o menos visibilidad a mi anterior obra, no es algo que me preocupe, lo que sí es cierto es que a lo largo de estos años se ha ido produciendo un crecimiento en cuanto a esa obra, algo que el lector podrá apreciar si echa la vista atrás y lee alguna de mis obras anteriores.
— ¿Cómo se combina la labor poética con el periodismo? ¿Divides el tiempo para evitar que uno de los dos oficios no se sienta desplazado? Tu poesía está muy afincada en la realidad. ¿Es posible hacer poesía y periodismo social sin que ambas facetas se mezclen?
— Bueno, en primer lugar indicar que yo no soy periodista, me dedico a la comunicación pero desde el ámbito institucional, coordinando la comunicación de algunos proyectos, a veces como freelance y otras trabajando por cuenta ajena. Todo se mezcla y todo suma. Lo que ocurre es que las estructuras que se utilizan son distintas. Yo me dedico a observar, soy un observador, luego transfiguro esa realidad en el poema.
— Supongo que esta es la pregunta más odiada por todos, pero aquí va. ¿Poesía o narrativa? ¿Por qué una y por qué la otra; o debería decir cuándo una y cuándo la otra?
— Ambas, no creo que sean excluyentes y sí complementarias, incluso fronterizas. Opino que se utiliza un género u otro cuando el cuerpo te lo pide, es algo que se da con naturalidad.
— ¿Cómo surge un poema? ¿Alguna manía para sentarte a escribir: escuchas música, fumas, bebes… (lo que puedas contarnos, claro 😉 )?
— Aparece cuando menos te lo esperas, mi única manía es escribir por la noche hasta bien entrada la madrugada. A veces escucho música mientras escribo, sí.
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Como suelo hacer, la segunda parte de la entrevista la publicaré el lunes. En ella podrán enterarse de todo lo que hay de fondo en la obra de José Ignacio Montoto. ¡Estén atentos!
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