Fuerza desconocida que se cree obra sobre los hombres y los sucesos. Esta es la definición que el Diccionario de la Real Academia de la Lengua españolada a la palabra destino.
Un concepto que utilizamos en multitud de ocasiones bien para justificar cualquier hecho que haya tenido lugar y sobre el que no exista una explicación lógica, o bien para manifestar que nuestra vida no se sabe a dónde irá a parar.
Dada, por tanto, la capacidad de anhelo, sueño o imaginación que engloba esta palabra, a lo largo de la historia de la literatura muchos han sido los autores que no han podido reprimir el deseo de escribir sobre dicho concepto.
Un ejemplo de ello es el afamado escritor Paulo Coelho que publicó en el año 1995 una obra que gira entorno al citado destino: A orillas del río Piedra, me senté y lloré. En ella se narra la historia de amor de dos jóvenes que se separan y que vuelven a reencontrarse once años después, cuando el caprichoso destino decide volver a unirlos.
Las vidas de ambos han cambiado mucho y son muy diferentes entre sí, ella es opositora y él se ha refugiado en la religión para superar sus miedos. No obstante, comparten algo en común: el deseo de ver cumplidos sus sueños.
Otro grande de la literatura universal de todos los tiempos también se decantó por hablar del destino en su bibliografía: Oscar Wilde. Y lo hizo con el libro El crimen de Lord Arthur Saville, que fue publicado en el año 1891.
Grandes dosis de intriga y protagonismo de las ciencias ocultas son las señas de identidad de este trabajo que tiene como moraleja una enseñanza: no hay que desafiar nunca al citado destino.
El destino, la vida, los sueños…
Para los que se planteen entender el concepto que nos ocupa desde un punto de vista filosófico, nada mejor que embarcarse en la lectura de El mundo de Sofía. En el año 1991 fue cuando vio la luz este trabajo de Jostein Gaarder que toma como punto de partida la carta anónima que recibe una adolescente al cumplir los quince años.
En dicha misiva se le hacen preguntas del tipo «¿de dónde viene el mundo?» para, en realidad, ofrecerle la propuesta de que realice un curso de filosofía.
De esta forma, no sólo se hará un repaso por la historia de esta citada disciplina sino también por ideas y conceptos relacionados con el azar, la vida o la incertidumbre.
La vida está en otra parte (1969) de Reilan Kundera o La vida es sueño (1636) de Pedro Calderón de la Barca son otros de los libros que abordan el tema de ese ser desdibujado e inmaterial al que le atribuimos la situación en la que nos encontramos o en la que estaremos pasados unos años.
No obstante, uno de los trabajos que está considerado por muchos como el que más aborda el tema que nos ocupa es La Biblia. Una de las obras más significativas de la historia que, cuanto menos, hace reflexionar a todo aquel individuo que decida emprender su lectura.
Comentarios1
A orillas del Rio piedra me senté y lloré es un libro maravilloso, uno de tantas obras de Coelho excepcionales, y Calderón de la Barca ni hablar, áún no termino de leerlo y ya me he deleitado con tan bellos versos filosoficos. El destino, uno de los tantos misterios del hombre cuya forma de actuar es dificil comprender...
Totalmente de acuerdo contigo Aktinos
Gracias Maria
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