Si cuando te sientas a disfrutar de un buen libro tienes claro que deseas no sólo entretenerte sino también experimentar sensaciones, emocionarte y reflexionar, te encantarán las obras del escritor pacense Luis Landero.
Él es un autor, ganador de prestigiosos galardones tales como el Premio de la Crítica Narrativa Castellana o el Premio Nacional de Narrativa, que ha conseguido convertirse en un referente en España. Y lo ha logrado gracias a que sus historias logran llegar al alma de quien las lee, porque giran en torno a sentimientos universales.
Si aún no has tenido la oportunidad de acercarte a ninguno de sus libros, te recomendamos que empieces por los siguientes:
Juegos de la edad tardía. En el año 1989 fue cuando publicó este trabajo, su premiada ópera prima, que viene a hacer referencia a las frustraciones del ser humano, a cómo necesita recurrir a la mentira para poder creerse alguien importante o para lograr la felicidad ficticia que no pudo alcanzar.
Todo ello lo plantea a través de la figura de Gregorio Olías. Este es un oficinista que se encuentra apesadumbrado por una vida que no es la que se imaginaba cuando era joven. Tiene una vida laboral monótona en una empresa de vinos y aceites, cuenta con una esposa fría y apática, no posee más motivaciones…Sin embargo, todo ello cambiará cuando, telefónicamente, conozca a Gil, un comerciante con el que congeniará desde el primer momento.
Lo que sucederá es que el protagonista ante su nuevo “amigo” planteará una vida que no es la real. Se creerá un escritor de éxito, un intelectual referente para muchos y triunfador en todos los aspectos de su vida. Sin embargo, como expresa el dicho popular, “las mentiras tienen las patas muy cortas”.
Retrato de un hombre inmaduro. Otra de las novelas de Luis Landero que más consigue llegar a emocionar a cualquier lector es esta, que “aterrizó” en las librerías en el año 2009.
El punto de partida se sitúa en un hospital, en una noche en la que un hombre de 65 años se encuentra pasando posiblemente las últimas horas de su vida. Una trágica situación que le lleva a realizar un repaso por los momentos más especiales, más duros y que más marcaron su existencia.
Así, recordará cómo conoció y disfrutó el amor, las personas que para él fueron verdaderos amigos, cómo sintió la libertad en muchos momentos o cómo su vida ha estado marcada por retazos de madurez y responsabilidad con otros absolutamente determinados por una actitud infantil.
El balcón en invierno. En 2014 es cuando ha visto la luz este último libro, por el momento, del escritor que se muestra no sólo como el más autobiográfico sino también como el más emotivo y sincero de todos.
Y es que en él se viene a contar la vida de aquel, cómo nació en un entorno donde la literatura no tenía cabida pero en el que empezó a emerger el gusanillo por ella y así cambió su destino. Todo mientras hacía frente a la pérdida de su padre y a un futuro incierto y duro junto a su madre.
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