El instinto criminal. Eje de las novelas de misterio de Jake Arnott

Si hay un autor polifacético en los últimos años ese es, sin lugar a dudas, el inglés Jake Arnott. Y es que dicho escritor no sólo se dedica a la Literatura sino que en su bagaje profesional se incluye también la interpretación o el desarrollo de funciones en el área de Servicios Sociales de la ciudad de Leds. Unos trabajos estos, unidos a otros muchos, que le han valido para conocer a un amplio número de personas de características muy diferentes, de ambientes muy distintos y en ocasiones cargadas de misterios y secretos.

De todo ello se ha valido así para desarrollar sus novelas que tienen como eje central el instinto criminal. Y es que en las mismas, enmarcadas dentro del género del misterio, se llevan a cabo asesinatos que deben ser investigados por las fuerzas policiales correspondientes para dar con las mentes complejas que se esconden tras ellos.

Este sería el caso, por ejemplo, de Delitos a largo plazo del año 2009. Esta es su primera narración de gran éxito y en ella el autor nos acerca a la figura de Harry Stark.

Este es un gánster del Londres de los años 60 que se caracteriza no sólo por su carácter maniaco y depresivo sino también por su incombustible sed de violencia. Una seña de identidad esta que hace que cualquiera que lo conozca no se pueda mostrar indiferente ante el mismo.

Cinco serán los personajes que «hablarán» al lector de este protagonista que además se define por ser un apasionado de la mejor gastronomía, porque le encanta vestir bien y con trajes a medida, y porque siempre le fascina tener a sus pies a jóvenes dispuestos a cualquier cosa con tal de contar con su beneplácito.

Poder y muerte

Tramas, intrigas y luchas de poder son la base de esta novela y también lo son de otro de los libros más importantes de Jake Arnott. Nos estamos refiriendo a Canciones de sangre, que vería la luz en el año 2010.

Un hecho real, acontecido durante los Mundiales de Fútbol de 1966, es el que inspiró al escritor a realizar este trabajo donde se cuenta cómo tres policías son asesinados de forma brutal, trayendo consigo la conmoción de toda Inglaterra.

Unos crímenes horrendos aquellos que harán que, a su vez, otros tres personajes comiencen a investigar lo acontecido y a encontrar el punto de luz que los aclaren. Estos no serán otros que el periodista Tony Meehan que ve en esta historia la posibilidad de establecer un punto de inflexión en su carrera; el detective Frank Taylor que considera que estas muertes son fruto de una venganza; y Billy Porter que opina que esos asesinatos fueron la consecuencia de un robo que salió mal.

Y así, llegamos a la última novela publicada por este autor que nos ocupa. Un relato, titulado Crímenes de película, que vio la luz en el año 2011 y que toma como protagonistas a personajes de los dos anteriores libros.

En concreto, en este libro se nos cuenta como en Londres, en la década de los años 90, el citado periodista Tony Meehan se encuentra realizando la biografía de un atracador de bancos que acaba de salir de la cárcel, se trata de Eddie Doyle. Un delincuente este que intentará dar con el paradero del gánster Harry Stark pues aún tienen cuentas pendientes.

La redacción de dicha biografía y los deseos de revancha de Doyle darán lugar a que hagan acto de aparición otros personajes cargados de «manchas en su expediente» como será el caso de Gaz, que se gana la vida vendiendo drogas a los jóvenes, o de Julie que intentará descubrir quién es el culpable de la muerte de su padre.