Te contamos acerca de la amistad entre dos grandísimas escritoras: María Lejárraga y Carmen de Burgos
En la historia de la literatura existen muchas amistades que han sido archiconocidas y que, en muchos casos, colaboraron con la proyección de determinadas obras. La escritora María O. Lejárraga, que tuvo intensas relaciones con intelectuales de su tiempo mantuvo en particular una relación muy significativa con la escritora Carmen de Burgos. En este artículo hablaremos sobre la importancia de este lazo.
Breve semblanza de María de Lejárraga
María de la O. Lejárraga García, conocida simplemente como María Lejárraga, fue una prolífica escritora y feminista española cuya importancia literaria cobró mayor significancia a raíz del exilio. Se la considera una de las grandes dramaturgas de su tiempo.
Nació el 28 de diciembre de 1874 en San Millán de la Cogolla, La Rioja, en el seno de una familia de clase media e ideas progresistas. Pese a criarse en un ambiente de libertad, tuvo que enfrentarse al yugo machista a través de un matrimonio que la dejaría condicionada en un mundo de sombras. Había publicado artículos en numerosas revistas y había sacado una colección de cuentos que le darían cierto puntapié a su carrera pero a partir de su matrimonio dejaría de firmar sus trabajos con su propio nombre.
En 1900 María Lejárraga se casó con Gregorio Martínez Sierra, un reconocido escritor, dramaturgo y empresario teatral. Este matrimonio marcó un punto crucial en su carrera literaria, ya que gran parte de su obra fue publicada bajo el nombre de su marido. A tal punto fue negada la voz de la autora que se ha descubierto que aunque decían que ambos escribían las obras, aunque sólo las firmaba él, la gran mayoría fueron escritas al completo por ella. Una injusticia y una mentira que se han sostenido durante muchos años, hasta que la lucha de un grupo de mujeres consiguió devolverle a ella el nombre y el lugar que le corresponden en la literatura.
A pesar de la invisibilidad de su autoría, la producción literaria de María Lejárraga fue notable. Algunas de las obras que escribió son por demás conocidas en el teatro español; podríamos mencionar Canción de cuna, El ama de la casa, Memorias de una mujer y Una mujer por caminos de España.
Además, Lejárraga escribió guiones para películas y nunca abandonó un género del que mucho disfrutaba: las cartas. Su voracidad intelectual la llevaron a dedicarse también a la traducción de obras, que servirían para enriquecer el panorama literario en España.
El aporte de María Lejárraga no se quedó constreñido a la literatura, también fue una destacada feminista. Junto a otras mujeres fue una de las fundadoras de la Asociación Nacional de Mujeres Españolas (ANME) y trabajó incansablemente por los derechos de las mujeres, promoviendo la igualdad de género a través de su obra y su activismo.
El estallido de la Guerra Civil Española supondría un golpe durísimo para la autora que se vio empujada a exiliarse por sus ideas republicanas. Estuvo un tiempo en Francia y después se trasladó a Buenos Aires, donde su carrera literaria continuaría activa al igual que su trabajo por la justicia. En esta época escribió sus memorias y muchas obras que dejan en evidencia su gran compromiso con el feminismo y la justicia social.
María Lejárraga falleció el 28 de junio de 1974 en Buenos Aires, Argentina. Se encuentra enterrada en el Cementerio de la Chacarita. Su obra abarcó diversos géneros literarios, desde novelas y obras de teatro hasta ensayos y artículos periodísticos; es recordada como una de las grandes feministas de su tiempo.
La amistad entre María Lejárraga y Carmen de Burgos
María Lejárraga fue conocida por ser una mente brillante en una época de explosión cultural en España. A lo largo de su vida mantuvo importantes vínculos con intelectuales contemporáneos y su relación con Carmen de Burgos es fue una de las más destacadas.
Carmen de Burgos, conocida también como ‘Colombine’, fue una influyente escritora, periodista y activista feminista española, y su amistad con Lejárraga fue significativa tanto en lo personal como en lo profesional.
Es importante señalar que Carmen de Burgos fue una de las primeras mujeres en España en ejercer como periodista profesional y para Lejárraga fue un referente indiscutible, además de una buena amiga. Al igual que María Lejárraga, Burgos abogó por los derechos de las mujeres y participó activamente en la vida cultural y política de la época. Su trabajo abordó temas de relevancia social, incluyendo la educación de las mujeres, el sufragio femenino y la reforma de las leyes matrimoniales.
La relación entre María Lejárraga y Carmen de Burgos fue más que una mera amistad; se trató de una colaboración basada en ideales compartidos y un profundo compromiso con la causa feminista. Ambas mujeres trabajaron juntas en diversas iniciativas para promover la igualdad de género y mejorar las condiciones de vida de las mujeres en España.
María Lejárraga y Carmen de Burgos se movían en los mismos círculos intelectuales y feministas de principios del siglo XX en Madrid y esto les permitió conocerse y establecer entre ellas un lazo sólido a lo largo del tiempo. Aunque su relación no ha sido profusamente documentada, se sabe que ambas sentían un gran cariño y admiración hacia la otra y que colaboraron de forma frecuente.
Es importante señalar que a través de sus escritos, ambas influyeron en la opinión pública y defendieron los derechos de las mujeres a la vez que trabajaron por el enriquecimiento de la literatura española. La amistad entre María Lejárraga y Carmen de Burgos dejaría una huella de influencia y un firme legado en la literatura y el movimiento feminista en España. Su trabajo conjunto ayudó a sentar las bases para futuras generaciones de mujeres que continuarían luchando por la igualdad y los derechos civiles.