La retórica en la política

La retórica en la política

Continuando con nuestros textos sobre la retórica y sus diferentes usos en el discurso social, hoy hablaremos un poco de su historia y, específicamente, su influencia en el mundo de la política.

Pero antes de comenzar quiero dejar claros tres conceptos que protagonizarán el curso de este artículo:

* Se llama retórica el arte de escoger las palabras adecuados para un mensaje para conseguir un determinado resultado en el oyente.

* La publicidad es una forma de utilizar la comunicación para promover un determinado producto o actividad comercial.

* Se define como política a la forma en la que los seres humanos resuelven los problemas surgidos de la convivencia social.

Fases de la retórica

Gracias a la retórica, la publicidad puede encarar dos operaciones bien diferenciadas e imprescindibles para desarrollarse nítida y precisa: la invención y la disposición-elocución.

  • Invención: se construyen argumentos válidos que ayudan a persuadir al interlocutor, dotando al emisor y al objeto del mensaje de un carácter atractivo, y construyendo una frase certera que convenza rotundamente al que escucha; por ejemplo: «Carlsberg, probablemente la mejor cerveza del mundo«.
    La invención es uno de los pilares en los que se construye la comunicación publicitaria; sin persuasión no hay ventas pero tampoco puede haber persuasión sin una elaborada estrategia que la produzca. Los argumentos de la invención se basan en aquellas valoraciones socialmente aceptadas: pautas de comportamiento, códigos de comunicación, emociones socialmente entendidas, etc.

  • Disposición-elocución: la forma en la que se presenta la invención, el lenguaje utilizado es lo que puede potenciarlo rotundamente o entorpecerlo. Es imprescindible el empleo de una función lingüística adaptada al público al que va dirigido el lenguaje.
    La forma más eficiente en la que se elabora este mensaje es desautomatizando el discurso, para causar impacto en el receptor y convencerlo de que después de esa comunicación su vida nunca volverá a ser la misma que antes.



Cuando hablamos de retórica, como ya lo hemos aclarado en otras ocasiones, nos referimos al uso del lenguaje. Dependiendo del público al que vaya dirigido un mensaje se utilizan una serie de códigos específicos y un vocabulario particular. Además, de acuerdo al tipo de influencia que se desea provocar en el lector se emplea un tipo u otro de retórica.

Es importante señalar que dado que la retórica tiene una finalidad comunicativa no puede analizarse fuera de una dimensión social y política; por tanto, es inevitable hablar de retórica en cada uno de los aspectos de la comunicación, incluso (y como era de esperarse) en la publicidad, con fines persuasivos.

La retórica en la política

La retórica en la política

Al pensar en retórica hoy en día la primera idea que se nos viene a la cabeza es publicidad, y no estamos tan errados. No obstante, debemos saber que ésta es una institución social moderna. La retórica tiene una historia mucho más antigua que la sociedad de consumo.

La noción de retórica surgió en Siracusa (Grecia) en el siglo V a.C. en medio de una crisis social que perjudicaba a los nobles (se les quitaban las tierras en nombre de un edicto que no tenía muchos fundamentos). Entonces, los damnificados comprendieron que la manera de defender sus derechos económico-políticos era poniendo en palabras sus necesidades de forma razonable frente a un jurado popular. Si conseguían ser lo suficientemente creíbles en sus argumentos, se les devolverían las tierras.

En ese hito histórico se plantaron las bases de la retórica, las cuales son indivisibles a ella: la argumentación conjetural, el carácter fiable del orador y la búsqueda del interés de los receptores. Las mismas no sólo se encuentran vigentes en los discursos políticos, sino también en la publicidad, y me atrevería a decir, en la mayoría de las ramas de la comunicación.

La retórica en la política

Según Aristóteles nuestra cualidad natural de seres políticos nos capacita para emplear los recursos del lenguaje en nuestro beneficio. Podríamos decir, por lo tanto que la retórica es una herramienta que nos permite conseguir metas a través de la comunicación.

El discurso retórico tiene la finalidad de convencer al auditorio de algo. En política adquiere una importancia mayor, al presentar un mensaje profundo, que puede traer consecuencias determinantes para una sociedad.

La política hace uso de la capacidad retórica para presentar una idea válida y consolidarla en las mentes de los ciudadanos; lamentablemente, el mal uso de este recurso ha llevado a que la propia palabra adquiera valores negativos y el lenguaje político se haya vuelto engañoso, perdiendo la credibilidad que en parte debería tener.

Podríamos resumir la importancia que tiene la retórica en la política con una sencilla frase: «Un buen uso de la retórica podría ayudar a diferenciar entre lo justo y lo injusto; un mal uso de ella podría hacer que aquellas cosas agrupadas en una categoría pertenezcan a la segunda o viceversa».

La retórica en la política

Comentarios1

  • Rapsodico

    Al igual que el primero, me ha encantado este artículo de la retórica en la política. Cuando lo he leído, he recordado las similitudes entre retórica y poesía. Ambas son cosas distintas, está claro, pero por ejemplo, la definición de retórica que aportas tiene mucho que ver con la finalidad de la poesía.
    Felicidades y un abrazo, Tes.



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