Leísmos, laísmos y dequeísmos

Leísmos, laísmos y dequeísmos

Hemos hablado recientemente acerca de los cambios realizados por la RAE sobre el uso de los acentos en los demostrativos, así como también de los errores más comunes en nuestra forma de utilizar el lenguaje. Hoy hablaremos de otra deficiencia a la hora de valernos del idioma para comunicarnos: el uso de dequeísmos y leísmos.

Espero que les resulte tan interesante como para mí lo fue investigar y compartirlo con ustedes.

El uso incorrecto de los pronombres la, le y lo ha dado lugar a la formación de los fenómenos conocidos como laísmo, leísmo y, aunque en menor medida, loísmo. Estos problemas no solo afectan la normal comunicación de las personas hispanohablantes sino que vuelve sumamente difícil y defectuoso el aprendizaje de nuestro idioma para los estudiantes extranjeros.

Dicho esto, cabe mencionar que no se trata de un simple defecto del habla sino de un uso incorrecto aceptado popularmente; de ahí la importancia de describirlo y corregirlo.

Diferentes tipos de leísmo

El leísmo surge cuando se sustituye el pronombre personal lo o la por le, cuando esta partícula ejerce la función de complemento directo y en los verbos transitivos.

Por ejemplo:

Andrés le ha encontrado.
Andrés la / lo ha encontrado.

Según lo deja en evidencia la Real Academia española, el uso del leísmo se considera vulgar. Pero a lo largo de las generaciones se han establecido ciertas modificaciones; tal es así que utilizar la forma leísta cuando el complemento directo es masculino (tratándose de una persona) puede tolerarse; no así cuando se trata de un femenino y, mucho menos, de un objeto inanimado.

Según esta definición podríamos decir sin equivocarnos «les vi llegar» (a ellos). Pero fallaríamos si utilizáramos la misma frase para referirnos «a ellas» y también para referirnos a «los aviones», «los barcos»,etc.

Leísmos, laísmos y dequeísmos

Es necesario señalar que existen diversos tipos de leísmos, estos son:

  • Leísmo aparente: tiene lugar cuando se altera el uso pronominal al ir ligados a determinados verbos que así lo exigen. No puedes decir «lo pegó» o «la pegó». Siempre debe decirse «le pegó». Lo mismo se da en verbos como tocar o enseñar.
  • Leísmo deferente o de cortesía: puede verse en el uso del dativo formal, de forma que el verbo concuerde acertadamente con la forma «usted». De este modo lo encontramos en frases como «El jueves lo llamaré» (a usted) / «El jueves le llamaré» (a usted).
  • Leísmo de contacto: provocado por la situación prolongada de bilingüismo o diglosia en contacto con otros idiomas con un sistema prenominal diferente. Tal es así que la convivencia entre nuestra lengua y otras como el guaraní, el euskera y el quechua ha provocado la supresión completa de la diferenciación entre pronombres de dativo y acusativo, utilizando en su lugar siempre «le».

El insufrible laísmo

Se denomina laísmo, el uso incorrecto de los pronombres personales femeninos (la y las) dependiendo del objeto indirecto al que se encuentren ligados. Aparece cuando en una frase se utiliza esta forma «la» o «las» en lugar de la que se considera correcta, es decir «le» o «les».

Es un fenómeno extendido sobre todo en ciertos países de Latinoamérica y en algunas regiones de España.

Leísmos, laísmos y dequeísmos

Un ejemplo de laísmo es:

Susana dijo que la dolía la cabeza (a ella). La forma correcta es le dolía la cabeza.

«La pegué», por su parte, es una de las formas más extendidas y, dependiendo del lugar (laísta o no laísta) en el que se expresem puede significar cosas diferentes. Entendido por alguien con un manejo del lenguaje no-laísta, se trata de una cosa que fue «adherida». Mientras que en una región laísta se entiende como una persona que fue golpeada.

No es difícil encontrarse con este uso incorrecto del lenguaje incluso en obras literarias; a tal punto se ha extendido el laísmo en ciertas regiones hispanohablantes.

Dequeísmos para todos los gustos

Por último hablaremos de los dequeísmos. Son mis errores favoritos. Posiblemente porque son los más difíciles de corregir dada la ambigüedad de ciertas reglas ortográficas.

Este error consiste en la utilización de la preposición delante de la conjunción cuando ninguna partícula de la oración así lo exige.

Por ejemplo:

«Me dijo de que estábamos por salir».

En este caso el error es difícil de descubrir. Si realizamos la pregunta modelo para desglosar cada parte de la oración y descubrir si su uso es o no correcto, descubriremos que frente a la respuesta, el «de» está de sobra.

En el caso del ejemplo dado preguntaremos «¿Qué me dijo?». Cuya respuesta será «que estábamos por salir».

Leísmos, laísmos y dequeísmos

Existen cinco casos en los que se utiliza de forma incorrecta la preposición «de». Estos son:

  1. cuando se antepone a una oración subordinada sustantiva de sujeto. Ejemplo: «Me pone feliz de que estés con nosotros». Deberíamos decir: «Me pone feliz que estés con nosotros».
  2. cuando se antepone a una oración subordinada sustantiva de complemento directo. Ejemplo: «Me contaron de que se iban de vacaciones». Deberíamos decir: «Me contaron que se iban de vacaciones».
  3. cuando se antepone a una oración subordinada cuya función es de atributo en oraciones copulativas. Ejemplo: «Mi esperanza es de que ingresemos». Deberíamos decir: «Mi esperanza es que ingresemos».
  4. cuando ponemos la preposición en locuciones conjuntivas donde no va. Dos casos pueden ser «A no ser de que…» o «Una vez de que»; en cuyos casos deberíamos decir «A no ser que» y «Una vez que».
  5. cuando se antepone a verbos que no la necesitan. Por ejemplo: «Insistieron de que fuéramos». Deberíamos decir «Insistieron que fuéramos».

Cometemos errores a diario. A veces ni siquiera somos conscientes de ello; y en la aceptación de estos malos usos vamos deformando el lenguaje y convirtiéndolo en un sistema lleno de inexactitudes. Me parece importante revisar estas cuestiones, tanto cuando hablamos como cuando escribimos. Es es el objetivo de este artículo. Espero que les haya servido de algo.

Leísmos, laísmos y dequeísmos

Comentarios4

  • Ramon33

    Deben multiplicar estos consejos por la utilidad que representan para corregir nuestras expresiones. Gracias.

  • Rubealonz Zuso Sanchez

    interesante

  • Nhylath

    Excelente explicación sobre "leísmos", "laísmos" y "dequeísmos"... Gracias Tes!...No he tenido dudas al respecto, pero siempre es bueno tomarlo en cuenta para su publicidad... así lo haré en el Twitter, Facebook y correos electrónicos!... Un fuerte abrazo!

  • Jøsé Vrbina

    Esto me ha sido muy útil, pues como la mayoría comente los mismos errores.



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