Antes de que los conquistadores españoles se establezcan en el territorio chileno, la literatura de dicha región ya había florecido. Los relatos en lengua araucana se caracterizaban por la riqueza de sus expresiones, aunque eran transmitidos en forma oral o por representaciones materiales, ya que los araucanos no habían desarrollado la escritura.
Por lo tanto, la oratoria era el principal género literario de la literatura chilena precolombina. Por ejemplo, los poetas araucanos asistían a los entierros de los muertos y recitaban sus composiciones, que luego eran retribuidas por los parientes del difunto.
Durante el periodo colonial, el militar español Pedro de Valdivia (1497–1553) redactó sus «Cartas a Carlos V». El también español Alonso de Ercilla (1533–1594) fue el autor de «La Araucana», un poema épico que narra la guerra entre los europeos y los mapuches. Otro escritor que se destaca en esta época es Pedro de Oña (1570–1643), nacido en Chile y autor de «El Arauco domado».
En el siglo XVIII, la literatura chilena comienza a forjar su identidad nacional. Aparecen figuras como Vicente Pérez Rosales (1807–1886), José Joaquín Vallejo (1811–1858, conocido por su seudónimo Jotabeche), Salvador Sanfuentes (1817–1860), José Victorino Lastarria (1817–1888) y Alberto Blest Gana (1830–1920, considerado el padre de la novela chilena), quienes en su mayoría se destacaron también en otros ámbitos, como la política, la diplomacia y el periodismo.
Es durante el siglo XX cuando surgen los principales referentes de la literatura chilena. Vicente Huidobro (1893–1948) fue el inventor del creacionismo, una corriente relacionada con las vanguardias. Pablo de Rokha (1894–1968) obtuvo el Premio Nacional de Literatura en 1965, mientras que Gabriela Mistral (1889–1957) y Pablo Neruda (1904–1973) se hicieron acreedores del Premio Nobel de Literatura.
José Donoso (1924–1996), Jorge Edwards (1931), Óscar Hahn (1938), Isabel Allende (1942, autora de «La casa de los espíritus») y Roberto Bolaño (1953–2003) son otros grandes escritores de la literatura chilena contemporánea.
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Hoy me topé con este Blog y me gustó mucho. A mí me gusta escribir y este es el primer blog que encuentro dedicado a la poesía y la literatura en general. Sigan adelante y muchas felicidades por su Blog.
Desire
Mi alma desolada triste y destrozada por amores prohibidos
Dime amada mía que puedo hacer para sacarte de mi recuerdo y de mi ser
Yo te amaba con locura con todas las fuerzas de mi corazón,
Pero tu eres ingrata has acabado con este amor.
Dime amada mía que hacer con esta pasión que me consume y, que me
esta haciendo pedazo ha este pobre y enajenado corazón.
Sabé is amada mía que fuiste la luz de mis ojos, la brisa de la mañana que entra por mi ventana a darme los buenos días
Dime amada mía que hacer para entrar en tu corazón; si tu sabéis que te quiero, que te adoro que estáis un momento lejos de ti es morir de desolación por ti.
Sabéis amada mía que te amo tanto que a veces pienso en darte mi eterna dependida marcharme de tu lado y hundirme en mi pasión; yo que abjuré ante el código que nunca mas volvería a sufrir por una silueta de luna, ni un rayito de sol; pero en los asunto del corazón no se manda, y cual gorrión en busca de miel caí preso por tus encanto y ahora mi pobre corazón se encuentra viviendo en el delirio y la pasión.
Por si ya no te vuelvo haber deseo, que seas feliz, y que el cielo te proteja siempre y que tu alma este feliz y aunque la mía se encuentre triste por ti, adiós amada mía, adiós, adiós, adiós.
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