Hoy les traigo otro artículo sobre el Modernismo, ese movimiento gestado al mismo tiempo en regiones opuestas (Centroamérica y Europa) y que supo hacerse un espacio irrevocable en las letras universales.
En Centroamérica Algunos países recibieron con más fervor y aceptación esta nueva tendencia estética, por eso el movimiento tuvo más allegados en algunos territorios y casi ninguno en otros.
Entre los países en los que resonó más este movimiento poético se encontraron Guatemala, El Salvador y Costa Rica. Y, pese a que el nombre que dio la vuelta al mundo fue el de Rubén Darío, hubo muchos otros que colaboraron para que el movimiento se convirtiera en un referente ineludible de la época.
A continuación, un brevísimo pantallazo de cómo se mostró el movimiento en estos países.
El Modernismo en Guatemala
Se dice que de todo lo malo se puede sacar algo bueno, y quizás sea así. Entre el año 1898 y el 1921 Guatemala estuvo gobernada por Manuel Estrada Cabrera, un presidente al que se le cuestionó muchísimo el gestionar de los asuntos de la Nación. Y, en parte, hay mucha verdad en ello: gobernó con la represión y causando el terror en aquellos ciudadanos que no compartieran sus ideales.
Pero en esa época la poesía de Guatemala se vio beneficiada por un repentino auge y una preocupación del Estado en ella, en promover nuevas corrientes. Tal es así que Cabrera organizó eventos para los cuales invitó a importantes autores de la época entre los que se destacaron dos importantes referentes del Modernismo: Rubén Darío y José Santos Chocano.
Esto estimuló y propulsó la creatividad literaria en este país, promoviendo la creación de grupos literarios. La poesía de otros autores, como fue el propio Chocano, sobre las nuevas generaciones de escritores, fue decisiva. De este modo, el Modernismo encontró en esta tierra un espacio seguro donde crecer y multiplicarse.
Entre las figuras de la poesía modernista de Guatemala podemos citar a Arévalo Martínez, Rafael Arévalo Martínez, Máximo Soto Hall, Rodríguez Cerna y Miguel Ángel Asturias.
El Modernismo en El Salvador
El Salvador fue otro país que recibió con los brazos abiertos este movimiento y que ofreció nombres importantes para ensalzarlo.
Lamentablemente este país goza de poca visibilidad a nivel internacional, sin por ello haber hecho poco por la literatura universal y, sobre todo, por la poesía; por eso es fundamental que intentemos acercarnos a este rincón de Centroamérica y le demos el lugar que se merece en la poesía modernista.
En este punto cabe mencionar las características heterogénea del Modernismo; tal es así que en ninguno de los países donde se afincó como movimiento, se presentó de igual forma. En El Salvador, por ejemplo, el movimiento fue iniciado por Francisco Gavidia, al introducir las tendencias de la poesía francesa en la poética local.
Este autor, ineludible de la poesía salvadoreña, no obstante, no ha recibido la importancia que se merece, ni su obra fuera de las fronteras nacionales. No obstante, el hecho de que este movimiento haya conseguido tanta importancia y haya llegado a modificar rotundamente las estéticas que pisaban fuerte en este país, son razones más que suficientes para leer a este autor y acercarse a través de él a muchos otros modernos salvadoreños.
El Modernismo en Costa Rica
El tercer país que se alistó al Modernismo fue Costa Rica, ofreciendo un aporte ineludible a la poesía universal y llenando de matices las letras nacionales.
La influencia de Rubén Darío, después de su breve estadía en el país, fue bastante importante para el movimiento y la poesía local. De todas formas, el Modernismo propiamente dicho llegó (o se afianzó) de forma tardía. Sin embargo, hubo autores que marcaron el camino para los que más tarde se destacarían.
En Costa Rica la voz de Fernández Guardia es una de las más destacadas y entre sus poemas se nota una gran preocupación por los temas nacionalistas; no obstante, otras voces como la de Magón o Gagini, en contra de los asuntos de la patria, también se desarrollaron dentro de esta corriente. Esta diversidad temática en la poesía está relacionada con que este movimiento se afirmó en una revolución estética; en el cómo decir, sin ser limitado en cuanto al qué decir.
Más tarde, la poesía Costarricense daría un giro hacia el Posmodernismo o el Modernismo Tardío en el que la poesía se depuraría de elementos europeizantes para aferrarse a una simbología local. Estos nuevos autores, entre los que se destacaron Julián Marchena, Rafael Cardona y Carlos Luis Sáenz, continuaron usando un estilo preciosista, pero aferrándose a temas y símbolos locales.
Como ven, el Modernismo es un movimiento amplio, repleto de nombres imprescindibles, por lo tanto reducirlo al siempre eterno Ruben Darío es un acto de injusticia para muchos otros que supieron ayudar a que esta corriente se afianzara para siempre en las letras universales.
Comentarios1
Relevante escrito. Una compilación de valores que agradecemos, en lo particular por Guatemala, es comprensible de que falten muchos VALORES, pero el artículo nos deja testimonio de nuestra literatura y el acicate para que nos demos a la tarea de encontrar a nuestros poetas, a estos virtuosos que han colocado el nombre de GUATEMALA EN EL ESFERA MUNDIAL.
Gracias
Dr. Rafael Mérida Cruz-Lascano
"Hombre de Maíz, 2009"
Guatemala, C. A.
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