¿Son los mejores libros aquellos que más se venden? Claro está que no es así, pero tampoco es cierto que aquellos libros que se vuelven muy populares son malos; existen muchas obras que son sumamente conocidas y que valen oro. La pregunta es ¿Cómo poder distinguir un buen libro de uno que no lo es? en poder responder a esta pregunta está la clave para saber escoger buenas lecturas. En este artículo intentaré comentar de qué forma lo hago yo, espero que les sirva.
Los buenos libros
Esta mañana, mientras leía las noticias del día y me disponía a escribir este artículo, por casualidad llegué a un foro literario donde encontré una frase que me pareció muy adecuada y quería compartirla con ustedes:
«El bestseller suele morir con sus contemporáneos, por el contrario, un buen libro los sobrevive y se convierte en clásico.»
No estoy tan de acuerdo con ella, supongo que habría que agregar «los malos bestsellers mueren«, pues algunos libros populares pueden ser muy buenos, como lo es casi toda la obra de Stieg Larsson.
Para que un libro sea bueno no sólo tiene que ser llevadero y cautivarte sino que además debe contar con los ingredientes necesarios, nada que pueda sobrar, ni tampoco nada que pueda faltar, todo debe estar puesto en un lugar preciso para representar una idea que el autor quiera expresar.
En el caso de una novela es importante que existan ciertos elementos que son los que le dan vida, estos son: acción, caracteres y ambiente. La acción es aquello que sucede, los hechos que forman en la historia, los caracteres son los personajes de dicha historia y el ambiente el espacio donde se desarrolla la obra, el escenario, el tiempo histórico y demás datos que hacen al contexto espacio-temporal de la historia.
Es importante que el autor tenga muy presente durante toda la redacción estas tres partes fundamentales e intente que toda la obra sirva a un objetivo preciso.
Las buenas novelas son aquellas que producen en el lector el efecto exacto que el autor ha querido, si un escritor consigue que los lectores de su novela entiendan qué es lo que quiso demostrar en esa obra, entonces se puede dar por satisfecho, puede darse cuenta de que realmente ha alcanzado con su obra el objetivo fundamental. Esto sólo es posible si la obra es homogénea, si no da deja baches, si todos los elementos que en ella aparecen tienen un sentido. El lector debe creer que la historia ocurre, que los mundos presentados son reales y que él mismo puede ser el protagonista de la novela.
Libros que hacen historia
Por supuesto que si no queremos pifiarla, si preferimos escoger un libro que sí o sí vaya a ser bueno, entonces lo mejor es inclinarse por los clásicos de toda la vida, los que durante generaciones vienen aportando a los lectores cientos de buenos recuerdos.
Entre los más destacados podemos nombrar:
«El retrato de Dorian Grey« de Oscar Wilde; es una de los novelas de terror gótica más reconocidas y ha alcanzado el lugar de clásico moderno de la literatura universal. Es la historia de un artista, Basil Hallward que queda impresionado de la belleza de Dorian Gray, un muchacho. Se obsesiona con él de tal forma que consigue que el muchacho desee mantenerse siempre joven y a través de un encantamiento lo consigue pero el efecto negativo de esto lo lleva a una vida miserable y triste.
«Orgullo y prejuicio» de Jane Austen, considerada la primera novela romántica de la historia. Es una novela muy tierna pero donde se pueden analizar también cuestiones que hacen a la realidad social de la época, principios de 1800. Una obra que te impactará, posiblemente y te hará emocionar en más de una ocasión.
«Los Karamasov» de Fédor Dostoyevski. Cualquiera de las obras de este autor merecen la pena ser leidas, pues sin duda es Fédor uno de los clásicos más fantásticos, el mejor autor entre los rusos y superior a muchos escritores de renombre. Sus obras son actuales en cualquier tiempo y pueden servir para pasar momentos muy entretenidos así como también para reflexionar acerca de cuestiones éticas, morales y políticas.
Existen muchos otros títulos que son considerados buenos, algunos buenísimos; por ejemplo, casi todo lo de Julio Verne, «La pianista» de Elfriede Jelinek, «El ruido y la furia» de William Faulkner, y autores como: Joseph Conrad, Albert Camus, Herman Hesse, Juan Rulfo, Miguel de Cervantes, Rosa Montero y Gabriel García Márquez.
Encontrar buenas obras
Stieg Larsson es un ejemplo de que no necesariamente un best seller es malo. Este escritor ha escrito grandes obras que se encuentran entre los títulos más vendidos en varios países. Para recomendar de este autor, sin lugar a dudas me decido por «La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina«, un libro escalofriante pero escrito con un ingenio y un talento destacables.
Para poder encontrar novelas que te lleguen y que se conviertan en una parte importante de tu vida no hay una técnica especial, pero compartiré contigo la que yo utilizo, puede que te sirva. Leo todo, absolutamente todo lo que puedo, lo que llega a mi mano: obras clásicas o modernas, conocidas o raras.
Comienzo a leer y en verdad si me gustan, al terminarlas las analizo, me fijo si la estructura es sólida, si lo que me transmite me parece relevante y si me la he pasado bien leyéndolo. Si la obra responde positivamente a estas tres cosas, entonces ¡estoy en presencia de un buen libro!
Comentarios4
Esta información está muy completa y agradezco por publicarla.
Ya que muchas veces no sé distinguir un buen libro, frete a tantos... frente a una biblioteca o a una librería... Y precisamente me enfoco a los clásicos... a los más conocidos...
Pero sin lugar a dudas un buen libro depende de cada gusto y a mi gusto Gabriel García Márquez era el primero en mis lista puesto a su forma tan atrapante de narrar y ahora lo voy viendo en casi el último número. No soy una lectora tan dedicada pero esta opinión de los que han pasado por cualquier libro sabe distinguir y me es tan importante la información. Gracias nuevamente
Importante e ilustrador artículo que nos ayuda a conocer nuestras preferencias. En lo personal, me encanta leer todo y de todos, pero ahora aprendo que existen diferencias entre los buenos y los ma´s buenos libros que existen y que cómo se descubre cuando son los mejores. Bella enseñanza, mil gracias.
"Hay literatura grande y sin embargo minoritaria: Kafka.
Hay literatura minoritaria y sin embargo mala; la mayor parte de los poemas que hoy se escriben, meros logogrifos o logomáquicos.
Hay literatura grande y mayoritaria: El viejo y el mar.
Hay literatura mayoritaria y mala, fotonovelas, literatura rosa, casi toda la literatura policial." E. Sábato
Ejemplos de literatura mayoritaria y mala son las novelas de Paolo Coelho, Isabel Allende y Gioconda Belli, entre tantos. Son pastiches de literatura clásica y moderna reciclados para un público inculto, que se entretiene más con sus blackberries y se embrutece con comida recalentada en microonda.
¡Gracias por sus comentarios!. Estoy completamente de acuerdo. Desgraciadamente hoy en día encontrar buenos libros se hace más complicado porque las posibilidades presentes a nuestro alrededor son infinitas... Considero que tenemos que hacer lo posible por huir de esa literatura mayoritaria y mala, y ¡sin duda Coelho se encuentra en la lista de lo que no debemos leer!
Saludos,
Debes estar registrad@ para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.