Uno de los autores más aclamados en todo el mundo durante el siglo XX fue, sin lugar a dudas, Julio Cortázar (1914 – 1984). Y es que él, nacido en Argentina y posteriormente nacionalizado francés, supo darle un aire nuevo y fresco a la literatura de aquel momento. Así, fue cómo le dio forma a obras que no sólo jugaban a estar a medio camino entre la realidad y la ficción sino que además rompían con los moldes establecidos en cuanto a linealidad temporal.
Poemas, ensayos, cuentos y obras teatrales salieron de esa pluma. No obstante, ahora queremos centrarnos en destacar las novelas que creó y que consiguieron una gran relevancia en todo el mundo. Se trata de libros que, en la actualidad, han logrado convertirse en clásicos de la literatura:
Los premios. En el año 1960 fue cuando se procedió a publicar esta narración que arranca cuando varias personas, gracias a un sorteo, embarcan en un navío en lo que se presenta como un tiempo de descanso y de relax.
Sin embargo, ese crucero vacacional pronto cambiará de función. Y es que surgirán diversos misterios que todos los viajeros intentarán desentrañar. Entre aquellos estarán el comportamiento extraño de la tripulación, el que está prohibido ir a la zona de la popa o que empiezan a darse casos de tifus.
El resultado de todo ese conjunto de acontecimientos, es que los pasajeros, que pertenecen a diversas clases sociales, intenten descubrir qué está sucediendo en el barco y qué hay detrás de toda esa aventura. Así, será como el lector no sólo irá conociendo más en profundidad a cada uno de los personajes sino que además será testigo del conjunto de prejuicios que tienen algunos por motivos de estrato social.
Rayuela. Sin duda alguna, la novela más aclamada y conocida de Julio Cortázar es esta, que vio la luz en el año 1963. Es más, se considera una de las más importantes de la literatura hispanoamericana de todos los tiempos.
Horacio Oliveira es el protagonista de la historia que se cuenta. Él es un intelectual argentino con muy pocos recursos económicos y el público lo conocerá en dos momentos cruciales de su vida.
Así, por un lado, se sabrá de él durante el tiempo que pasa en París. Una época en la que no sólo acude a interesantes encuentros literarios y artísticos sino en la que también mantiene una relación muy especial con Lucía, una mujer uruguaya que no tiene tanta cultura como él pero con la que se entiende perfectamente a nivel sentimental.
Sin embargo, su relación se rompe cuando ella desaparece a raíz de la muerte de su hijo. Una situación que hace que Horacio intente dar con ella, pero lo único que consigue es ser deportado, después de ser pillado in fraganti teniendo relaciones con una prostituta.
Por otro lado, se descubre cómo es la vida en Argentina del protagonista después de dicha deportación. Allí empieza a trabajar en un circo y vive una etapa mental bastante complicada, ya que es incapaz de quitarse de la cabeza a Lucía, lo que le llevará a confundir a personas con ella e incluso a acometer una locura peligrosa.
62 Modelo para armar (1968) o Libro de Manuel (1973) son igualmente otras novelas cumbre dentro de la bibliografía de Julio Cortázar.
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