Si hay un escritor que en estos momentos esté de máxima actualidad ese es el francés Patrick Modiano, nacido en París en 1945. ¿El motivo? Que ha sido galardonado con el Premio Nobel de Literatura 2014.
La melancolía de sus libros, su calidad narrativa o su capacidad de llegar al espectador son tres de las principales cualidades que tiene aquella pluma. Y son las que han servido para que le sea concedido ese importante reconocimiento, que viene a aumentar la lista de premios que ha recibido hasta el momento en la que se encuentran también el Goncourt (1978) o el de Novela de la Academia Francesa (1972).
Pero además de todo esto, hay que destacar que varios de sus trabajos han sido llevados a la gran pantalla. Precisamente en ellos vamos a centrarnos ahora, porque resultan especialmente interesantes y entretenidos:
Villa triste. En el año 1976 fue cuando se publicó esta novela, adaptada al cine por Patrice Lecont bajo el título El perfume de Yvonne (1994).
El protagonista no es otro que un joven que se hace pasar por el conde Víctor Chmara y que, en plena década de los años 60 e intentando huir de la guerra franco-argelina, se marcha a vivir a una pequeña ciudad cercana a Suiza. Allí conocerá a Yvonne, una actriz francesa que le encandilará desde el primer momento. Tanto es así que comenzarán una apasionada historia de amor.
La relación con aquella le permitirá codearse con los personajes más influyentes y singulares de la sociedad francesa. Un hecho que pronto llevará a que su mentira se encuentre en la cuerda floja.
Domingos de agosto. 1986 fue, sin embargo, el año elegido por Patrick Modiano para llevar a cabo la presentación oficial de este otro libro que también cuenta con su adaptación cinematográfica. En concreto, esta corrió a cargo en 2006 de Mikhaël Hers.
En la ciudad de Niza es donde se sitúa la trama, que gira en torno a la figura de un joven que se encuentra trabajando en una gasolinera, a pesar de haber ejercido en el pasado como fotógrafo relevante.
Un día llega hasta su lugar de trabajo un hombre que resulta ser el marido de su amante. Este intenta atrapar al protagonista, pero, sin embargo, el joven logra escapar. Un respiro momentáneo será el que tenga, pues al día siguiente recibirá una nota en la que se le comunica que nunca más volverá a saber de ella ni tampoco del esposo.
Todo ello traerá consigo una situación complicada para el muchacho. Tanto es así que empezará a analizar a fondo su vida, las experiencias que ha tenido y las vicisitudes a las que ha hecho frente. De esta forma será como el lector irá descubriendo a las mujeres que pasaron por su vida o a los asuntos turbios en los que participó para poder sobrevivir en el marco de los tiempos de la posguerra en París.
Tan buenos chicos (1985) o Joyita (2003) son otros de los libros del autor francés que también cuentan con su propia adaptación cinematográfica.
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